Como se llamará el nuevo PRD? PRDA o PRP, ¿Cuál escoge Hipólito?


Hipólito Mejía, PRD


La propuesta del doctor Hugo Tolentino Dipp para abandonar en masa el Partido Revolucionario Dominicano y construir una nueva plataforma política, no es una idea improvisada al calor de un fallo desfavorable del Tribunal Superior Electoral, sino un propósito que lleva meses en discusión y que ha dividido en bandos irreconciliables al sector del ex-presidente Hipólito Mejía.

Los más radicales abogan por el abandono inmediato del partido ante la realidad incontrastable de que el sector de Miguel Vargas controla su estructura orgánica, pero otros consideran que esa aventura conlleva riesgos incalculables en una formación partidaria de tanta tradición como el PRD, con 74 años de presencia activa en la sociedad dominicana y con un legado de cuatro presidentes de la República elegidos por abultadas mayorías.

En esta contradicción aparece Luis Abinader como abanderado del sector que plantea la “resistencia interna”, descartando de plano la más remota posibilidad de abandonar el partido para dejar vía franca a Miguel Vargas y sus propósitos electorales.
Vargas, entre tanto, prepara para mañana lunes una alocución al país donde anunciará el inicio de “una jornada de reconstrucción” de la unidad del PRD con la celebración en la presente semana de la reunión de su Comité Ejecutivo Nacional pendiente desde hace seis meses donde anunciará la convención eleccionaria de febrero venidero y se elegirán las nuevas autoridades.

Asimismo, se trazará la línea de “oposición radical pero constructiva” al gobierno del Partido de la Liberación Dominicana y en especial al propósito anunciado por el ex-presidente Leonel Fernández de gobernar por los próximos 20 años a partir del 2016.

La propuesta de Tolentino Dipp


Al doctor Tolentino Dipp se le disparó el seguro el pasado martes al proponer al líder de su grupo, Hipólito Mejía, abandonar el PRD para conformar una nueva plataforma electoral, y hasta nombre sugirió: “Partido Revolucionario Dominicano Auténtico (PRDA) o “Partido Revolucionario Peñagomista (PRP).

$ads={1}

La sugerencia no fue improvisada y aunque se hizo en el contexto del fallo del Tribunal Superior Electoral que rechazó un recurso de amparo interpuesto por unos cien seguidores de Mejía que alegan haber sido excluidos como miembros del CEN, es una alternativa que en los últimos meses se ha venido planteando a profundidad entre los principales teóricos y “pensadores” del antiguo PPH.

Lo que se argumenta es que Miguel Vargas tiene muy pocos seguidores tanto dentro como fuera del PRD y que una fuerza alterna originaria del partido, podría ser la catapulta de un proyecto presidencial exitoso mirando las elecciones de 2016. Esa nueva agrupación partidaria sería liderada por Mejía, que dependiendo del escenario futuro podría marginarse de la candidatura presidencial a favor de una fórmula encabezada por Abinader.

La ortodoxia perredeista que hace causa común con Abinader, sin embargo, descarta tal posibilidad partiendo de una experiencia que tiene a mano: “La historia del PRD demuestra que todo el que se ha marchado del partido, se ha ido solo o muy pobremente acompañado...” Empezando por su líder-fundador Juan Bosch, que en el 1973 renunció para formar el PLD, y después de eso el PRD ganó tres elecciones.

Desde entonces esa organización ha sobrevivido a otras dos grandes divisiones, la primera encabezada por el propio Peña y Jacobo Majluta que dio origen al PRI y al BIS, y luego con la expulsión de Hatuey De Camps en 2003 que dio origen al PRSD.

De todas sus fracturas, que se remontan a su propio origen de La Habana en 1939, el PRD ha salido en muletas pero vivo y con capacidad para recomponerse, como confían Miguel Vargas y sus ideólogos que ocurriría en la presente coyuntura si se produjese la salida de los principales seguidores de Hipólito Mejía.

“De hecho, Hipólito ya está fuera del partido y nada ha ocurrido al margen del clásico derecho al pataleo...”, comentaba esta misma semana en televisión uno de los más cercanos colaboradores de Vargas, el jurista Eduardo Jorge Prats, primo-hermano de Orlando Jorge Mera, sancionado junto a Mejía por violación a la disciplina interna del partido, en una decisión refrendada por el TSE.

Los planes de Abinader

Luis Abinader tiene otros planes. Lo que ha discutido entre sus simpatizantes es la reincorporación al partido y luchar desde adentro por ampliar su espacio con miras a ganar la candidatura del ‘16 en las condiciones que plantee el grupo de Vargas... “Siempre que sea con la debida transparencia”.

Aunque de entrada objeta el levantamiento de “un padrón clandestino” que dice ha estructurado Vargas para la próxima convención, Abinader plantea la necesidad de que “el pleito se eche adentro”, y se ponga fin por la vía institucional a la crisis que agobia a su partido y que le impide tener una clara visión de su futuro electoral.

Sus seguidores no sólo descartan de plano una eventual salida del PRD, sino que consideran imprudente la declaración de Tolentino sobre la conformación de una nueva organización que le sirva de plataforma electoral.

“Eso es lo que quiere Miguel Vargas... Que le dejemos nuestro partido para negociar con el gobierno y la continuidad de Leonel Fernández”, declaraba en días recientes el hijo menor de Peña Gómez, Tony Peña Guaba, coordinador nacional del grupo de Abinader.

Tony ha propugnado siempre por un reencuentro de la dirigencia perredeista al margen de los intereses electorales de los diversos grupos.

“Eso fue lo que nos enseñó mi padre y líder del partido: Luchar siempre por la unidad”.

Las contradicciones internas


En el seno del grupo de Mejía, al margen de la voluntad de Abinader, hay otras disidencias a tomar en cuenta. César Sánchez, por ejemplo, plantea que la salida del PRD confi - gura un salto al vacío que pone en riesgo la existencia de ese sector perredeista.

Incluso, entre los llamados “viejos robles” del perredeismo existe división sobre la decisión que debe marcar el rumbo de esa corriente interna. Ivelisse Prats-Ramírez, por ejemplo, plantea la vía institucional “para rescatar el partido”, mientras Milagros Ortiz considera que es viable la “salida en masa” del PRD en procura de nuevas siglas que sustenten sus propósitos electorales.

Es bien conocida la posición de algunos comunicadores afi nes a Mejía favorable a la integración de una nueva formación partidaria que concurra a las elecciones del ‘16 con candidatos paralelos a los que pueda llevar el PRD.

La consigna de Tolentino es “dejarle el cascarón” a Miguel Vargas y partir hacia un nuevo partido Peñagomista ha encontrado eco en los llamados programas interactivos que se manipulan por la vía telefónica o a través de las redes sociales para crear opinión pública. Aún en esos programas las opiniones sobre la propuesta de Tolentino están divididas.

Los resabios del sector de Mejía por el fallo del Superior Electoral ha enconado las pasiones al extremo de que el propio Mejía anunció el pasado jueves que sus seguidores irán a la calle a protestar contra “el plan de Leonel Fernández de destruir el PRD”.

$ads={1}

El desatino fue criticado por el cardenal Nicolás López Rodríguez que llamó al liderazgo perredeista a dirimir sus diferencias en el plano legal sin pretender perturbar la tranquilidad ciudadana...”La calle es para transitar”, proclamó el prelado en su enésima exhortación a la dirigencia del PRD para que diriman sus problemas internos con altura.


EL DISCURSO DE VARGAS Y LA EXPLICACIÓN PLANES DEL PRD


En principio se ha informado que Vargas hablará mañana lunes a través de una cadena de radio y televisión de alcance nacional. Su propósito es explicar al país los planes de su partido, anunciar la convocatoria a la reunión del CEN para esta misma semana y dejar abiertos los trabajos organizativos para la próxima convención de febrero con el levantamiento de un nuevo padrón de militantes.

También explicará los detalles del propósito unitario que se plantea la creación del “Pacto de la Esperanza” en el que trabajan desde hace semanas los principales dirigentes del PRD, del Partido V República y del Partido Demócrata Institucional, a los que se sumaría en los próximos días el Partido Nacional de Veteranos y Civiles y otras formaciones y agrupamientos alternativos.

Vargas también planteará en su discurso, dijeron allegados suyos, una nueva línea de oposición al gobierno a propósito de los planes continuistas anunciados por el presidente del PLD y ex-presidente de la República, Leonel Fernández, que en un arranque de emoción el pasado fin de semana vaticinó que su partido gobernará hasta el 2036, los próximos 20 años a partir de las elecciones venideras.

“Ese pronóstico de Leonel es la principal razón para conformar un bloque opositor que detenga la intención del partidismo único que añora el ex-presidente y líder del peledeismo...”, comentó Vargas entre sus seguidores.

Artículo Anterior Artículo Siguiente
Consentimiento de cookies

Este sitio web utiliza cookies para ofrecerle una mejor experiencia de navegación. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta el uso de Cookies

Detalles de Cookies