Pacheco precisó que aunque el
PRD no está en una posición cómoda en este momento, sin embargo todavía está a
tiempo de que los bandos enfrentados se pueden poner de acuerdo para que el
partido haga un papel airoso en los venideros comicios.
Agregó que no cabe dudas de que en la actualidad el partido blanco se encuentra dividido, y en tal sentido corre el riesgo de desaparecer como organización política.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el expresidente de la Cámara de Diputados urgió la celebración de una cumbre del liderazgo en la cual se decida “separarse definitivamente o unificarse bajo cualquier circunstancias”.
Sostiene que la meta de cualquier perredeista que le duela su partido debe ser preservarlo más allá de los comicios del 2016, para que no sucumba, perezca o se destruya.
“Porque una derrota humillante en el 2016 es casi seguro que conduzca a la desaparición del PRD, y creo que todavía estamos a tiempo de, no solo hacer un papel airoso en esos comicios, sino preservar la organización más allá de esa fecha”, reiteró Pacheco Ozoria.
Pidió a Miguel Vargas, Hipólito Mejía, Luis Abinader y Neney Cabrera poner de manifiesto su grado de tolerancia para que se lleve a cabo esa cumbre cuya única finalidad sea salvar al PRD de una destrucción.
Advirtió a ese liderazgo político que si no hacen un último esfuerzo por la unidad del partido blanco, “todos seremos responsables” ante la historia de la desaparición del partido.
Dijo que la realidad del PRD está reflejada perfectamente en los datos arrojados en la última encuesta de la firma Gallup según la cual ese partido apenas cuenta con un 21 por ciento en la preferencia de la población.
Agregó que no cabe dudas de que en la actualidad el partido blanco se encuentra dividido, y en tal sentido corre el riesgo de desaparecer como organización política.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el expresidente de la Cámara de Diputados urgió la celebración de una cumbre del liderazgo en la cual se decida “separarse definitivamente o unificarse bajo cualquier circunstancias”.
Sostiene que la meta de cualquier perredeista que le duela su partido debe ser preservarlo más allá de los comicios del 2016, para que no sucumba, perezca o se destruya.
“Porque una derrota humillante en el 2016 es casi seguro que conduzca a la desaparición del PRD, y creo que todavía estamos a tiempo de, no solo hacer un papel airoso en esos comicios, sino preservar la organización más allá de esa fecha”, reiteró Pacheco Ozoria.
Pidió a Miguel Vargas, Hipólito Mejía, Luis Abinader y Neney Cabrera poner de manifiesto su grado de tolerancia para que se lleve a cabo esa cumbre cuya única finalidad sea salvar al PRD de una destrucción.
Advirtió a ese liderazgo político que si no hacen un último esfuerzo por la unidad del partido blanco, “todos seremos responsables” ante la historia de la desaparición del partido.
Dijo que la realidad del PRD está reflejada perfectamente en los datos arrojados en la última encuesta de la firma Gallup según la cual ese partido apenas cuenta con un 21 por ciento en la preferencia de la población.
Pacheco dijo que en su caso particular nada ni nadie lo hacer abandonar las filas de su partido en el cual entró desde adolescente de la mano de su líder y guía José Francisco Peña Gómez.
Recordó que ha asumido los sacrificios que el partido le ha solicitado, y puso como ejemplo el hecho de aceptar la candidatura a la sindicatura del Distrito Nacional en los comicios del 2006, cuando el PRD se encontraba en uno de los peores momentos de aceptación pública.
En otro orden el dirigente del partido opositor aseguró que el país que pintó el presidente Danilo Medina en su rendición de cuentas ante la Asamblea Nacional, dista mucho de la realidad que viven la mayoría de los dominicanos.
Aseguró que Medina no tocó temas sensibles que la población esperaba como es el caso de Loma Miranda y la falta de circulante que se siente en la población, sobre todo en la economía popular.