En una declaración conjunta, la anfitriona calificó de "excelente" la reunión de trabajo con Putin
BUENOS AIRES.- Argentina y Rusia afianzaron ayer su alianza estratégica con la firma en Buenos Aires de varios acuerdos bilaterales, entre los que destaca un convenio de cooperación nuclear, en una ceremonia encabezada por los jefes de Estado de ambos países, Cristina Fernández y Vladimir Putin.
La firma de acuerdos "revela el carácter estratégico de la relación" bilateral, dijo Fernández al término del encuentro que mantuvo con Putin en la sede del Gobierno argentino.
En una declaración conjunta, la anfitriona calificó de "excelente" la reunión de trabajo con Putin, ensalzó los "lazos de amistad" con Rusia y destacó la importancia del acuerdo de cooperación nuclear.
Ante la prensa, Putin afirmó que Rusia tiene "tecnología avanzada" en el campo nuclear y se mostró confiado en que las compañías de su país puedan participar "en la modernización de la potencia generadora de energía en Argentina".
El mandatario anunció que la corporación rusa Rosatom participará en la construcción de la central nuclear argentina Atucha III, mientras que la firma Inter Rao está interesada en el proyecto hidroeléctrico de Chihuido, en la provincia argentina de Neuquén (oeste), que tiene un coste aproximado de 2.000 millones de dólares.
Fernández anticipó también que una comitiva rusa viajará a la formación de hidrocarburos de Vaca Muerta para conocer "la segunda reserva de gas no convencional en el mundo y la cuarta de petróleo".
Junto al tratado de cooperación nuclear, se firmaron también convenios bilaterales en materia de comunicación masiva, de asistencia legal recíproca en materia penal, de extradición y de traslado de condenados.
Además, ambos presidentes destacaron la intención de aumentar el intercambio comercial bilateral, que creció un 16 % en 2013 pese a la crisis económica mundial, y de fortalecer los vínculos culturales en 2015, cuando se cumplen 130 años de relaciones diplomáticas.
La presidenta argentina remarcó la buena sintonía entre Moscú y Buenos Aires en el ámbito internacional y el deseo común de "una reforma financiera global".
A su juicio, la próxima reunión del G20 (que agrupa a economías desarrolladas y emergentes) debería incluir en su agenda "la necesidad de regular globalmente el flujo de capitales que ha tornado al mundo en un casino financiero" y tiene a muchos países "ahogados en deudas".
Fernández destacó la decisión de Putin de condonar el 90 % de la deuda de 35.200 millones de dólares que tenía Cuba con ese país, aunque aclaró que su Gobierno no pretende un favor similar.
""Nosotros no pedimos que nos condonen, somos más sencillos, sólo pedimos que nos permitan pagar", dijo sobre el litigio que mantiene el país suramericano con fondos especulativos.
La Justicia estadounidense mantiene retenido el último pago de Argentina a los acreedores de deuda reestructurada (92,4 %) hasta que el Ejecutivo de Fernández no cumpla el fallo que lo obliga a entregar 1.500 millones de dólares a fondos especulativos que se negaron a entrar en los canjes de deuda.
Fernández también se refirió a la "situación de fragilidad que se vive en Medio Oriente" e instó a los líderes mundiales a "desmontar situaciones de conflictividad y enfrentamiento".
Recordó que Argentina y Rusia se opusieron en la última reunión del G20 a la intervención militar en Siria y, en cambio, quienes sostenían la postura contraria "hoy buscan aliarse con la propia Siria para parar al islamismo terrorista que pretende fundar un califato en el territorio de Irak".
Por la noche, el mandatario ruso será homenajeado con una cena en el Museo del Bicentenario, en la que también estará presente el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro; el de Uruguay, José Mujica; y el de Bolivia, Evo Morales.
Putin, quien definió hoy a Argentina como "un socio muy importante", aterrizó esta mañana en Buenos Aires procedente de La Habana, tras realizar una breve escala en Managua.
Desde Argentina partirá rumbo a Brasil, última escala de su gira latinoamericana, donde mañana presenciará la final del Mundial de fútbol en Río de Janeiro y el martes participará en la reunión de potencias emergentes BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), a la que también asistirá Fernández como invitada