Le dieron un machetazo, hecho del que culpan a seguidores de Guido Gómez Mazara. La convención fue suspendida en la zona
Montecristi.- Un seguidor de Miguel Vargas, presidente del PRD, resultó con una mano amputada por parte de grupos señalados como simpatizantes de Guido Gómez Mazara, quienes impidieron a tiros y con armas blancas la realización del proceso de votación que se celebraba en el único centro habilitado en la calle Duarte, sector Las Flores de esta ciudad.
El herido fue identificado como Jochi Morel, de 28 años, quien resultó con un machetazo en la mano derecha, que le provocó que el miembro le fuera amputado en un centro de salud del lugar.
Durante el incidente también resultó lesionado Jimi Silvestre, quien fue atacado por alegados seguidores de Guido Gómez Mazara, porque supuestamente no aparecieron registrados en el padrón.
Según se informó, las agresiones fueron iniciadas por los hermanos Simón Vargas y otro hombre solo identificado como Kinki, quienes son buscados por las autoridades policiales para someterlos a la Justicia.
Al lugar del incidente se presentó una patrulla de la Policía, cuyos miembros realizaron varios disparos para dispersar la trifulca, mientras que el dirigente Juan Vargas anunció la suspensión del proceso, para evitar incidentes mayores.
Montecristi.- Un seguidor de Miguel Vargas, presidente del PRD, resultó con una mano amputada por parte de grupos señalados como simpatizantes de Guido Gómez Mazara, quienes impidieron a tiros y con armas blancas la realización del proceso de votación que se celebraba en el único centro habilitado en la calle Duarte, sector Las Flores de esta ciudad.
El herido fue identificado como Jochi Morel, de 28 años, quien resultó con un machetazo en la mano derecha, que le provocó que el miembro le fuera amputado en un centro de salud del lugar.
Durante el incidente también resultó lesionado Jimi Silvestre, quien fue atacado por alegados seguidores de Guido Gómez Mazara, porque supuestamente no aparecieron registrados en el padrón.
Según se informó, las agresiones fueron iniciadas por los hermanos Simón Vargas y otro hombre solo identificado como Kinki, quienes son buscados por las autoridades policiales para someterlos a la Justicia.
Al lugar del incidente se presentó una patrulla de la Policía, cuyos miembros realizaron varios disparos para dispersar la trifulca, mientras que el dirigente Juan Vargas anunció la suspensión del proceso, para evitar incidentes mayores.