MADRID.- Cerca de 200.000 militantes socialistas en España están llamados a votar este domingo para elegir a un nuevo líder con el que concurrir a las próximas elecciones generales, que se celebrarán a finales de 2015 o a principios de 2016.
Por primera vez en 135 años el PSOE celebrará elecciones primarias abiertas a los 197.468 militantes que tiene en la actualidad.
Tres candidatos se disputan la secretaria general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE): Pedro Sánchez, Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias, quienes han competido en una intensa y a veces tensa campaña electoral.
Uno de ellos sustituirá a Alfredo Pérez Rubalcaba, ya en retirada y que esta semana prefirió no asistir al pleno del Congreso de los Diputados de España, tras anunciar que dejará su escaño el próximo mes de septiembre.
Pérez Rubalcaba anunció su partida tras la estrepitosa derrota sufrida por su partido en las elecciones europeas del 25 de mayo pasado y después de un cúmulo de fracasos desde que en noviembre de 2011 los socialistas perdieron las elecciones generales frente al Partido Popular (centroderecha), que las ganó con mayoría absoluta.
Sánchez y Madina aparecen como los favoritos y los tres candidatos apelaron el viernes al "juego limpio" y a que prime la unidad de los socialistas después de las primarias.
En el PSOE están convencidos de que estas primarias marcarán un antes y un después en la dinámica de un partido que se resiste a ser condenado a la irrelevancia política y que confía en que esta regeneración de caras y programa sirva para empezar a recuperar su crédito electoral.
Las agrupaciones locales del PSOE abrirán este domingo a las 10.00 hora local (08.00 GMT) y cerrarán a las 22.00 local (20.00 GMT), una jornada que coincide con la final del Mundial de Fútbol en Brasil y con un día soleado en toda España, una combinación que podría desincentivar la afluencia a las urnas.
Ante este riesgo, el partido ha puesto en marcha una campaña de publicidad interna animando al voto, con correos electrónicos a los afiliados y difusión por las redes sociales.
Todas las candidaturas confían en una gran asistencia, teniendo en cuenta que ésta es una cita inédita en el PSOE y que, cuantos más afiliados voten, mayor será la legitimidad del nuevo secretario general y menos las tentaciones de los dirigentes territoriales de tratar de condicionarle.
Un líder debilitado desde el inicio podría ser rehén de los "barones" territoriales, sobre todo de la popular presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ya que la mayor parte de los otros secretarios regionales tiene su propio crédito a punto de agotarse ya, tras las sucesivas derrotas en sus respectivas federaciones.
Quizás por eso los aspirantes han querido desligarse del "aparato", el federal y los regionales, y todos ellos han optado por contar con cuadros medios del partido y no con los primeros espadas, que han guardado públicamente silencio sobre sus preferencias personales.
En Cataluña (noreste) se celebrarán además las primarias del Partido Socialista de Cataluña (PSC) -histórico socio del PSOE-, que prevé elegir al nuevo primer secretario, aunque en este caso sólo cuenta con un candidato: Miquel Iceta.
El PSC llega a estas primarias con notables divisiones y desgaste como consecuencia principalmente de sus posiciones en el debate soberanista de Cataluña, liderado por el partido conservador (CiU) y por el izquierdista republicano y nacionalista ERC.