Santo Domingo Este.- El conjunto de actividades con las que ayer el diputado Manuel Jiménez inició la celebración del XIII Aniversario de la Fundación del municipio Santo Domingo Este y dela provincia Santo Domingo se constituyó en la primera derrota en términos de percepción del alcalde Juan de los Santos, quien de ahora en adelante se enfrentará a un político con estrategias muy distintas a las suyas para conquistar simpatías.
De los Santos se auto aisló de las celebraciones, a pesar de que fue invitado a participar a una ceremonia, como la misa solemne oficiada por el Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, en la parroquia Paz y Bien.
A todas luces, Jiménez, de quien se dice que es incansable trabajando en busca de sus propósitos, tomó "fuera de base", al alcalde de los Santos, quien no tuvo forma de reaccionar para siquiera intentar opacar el impacto de la acción eminentemente política auspiciada por el diputado que aspira ser el próximo síndico de Santo Domingo Este.
Por lo pronto, Jiménez dio demostraciones sobradas de que es capaz de unir voluntades de distintos sectores, incluso dentro y fuera del Partido de la Liberación Dominicana.
No solo eso, sino que el diputado tuvo la habilidad de llevar a la parroquia Paz y Bien al más representativo de los pastores evangélicos de Santo Domingo Este para escuchar una eucaristía oficiada por el cardenal López Rodríguez.
Nada de esto ha sido posible lograr, hasta ahora, por el alcalde de los Santos, quien aspira a una segunda reelección.
Ayer, el gran ausente durante los actos de conmemoración del XIII Aniversario de la Fundación del Municipio Santo Domingo Este fue el alcalde.
En el templo religioso todos se percataron de su ausencia, sobre todo porque allí estaban presentes la Senadora Cristina Lizardo, el Gobernador de la provincia Santo Domingo Juan Frías y el diputado Radhamés Fortuna, los tres del Partido de la Liberación Dominicana.
No solo eso, sino que Jiménez tuvo la osadía de reunir bajo un mismo techo y sentar en el mismo banco a esos peledeístas y al ex senador Tonty Rutinel, del PRD, y al ex síndico, Domingo Batista, del PRD.
Todo el mundo sabe que Rutinel y Batista son rivales.
Sin embargo, Jiménez los sentó uno al lado del otro, como si se tratara de dos buenos compañeros.
Allí estaban también ingenieros contratistas que construyen obras del ASDE.
Más aún, para aportar a su imagen de concertador y unificador, Jiménez logró que el diputado del PRM José- Bertico- Santana, fuera a la parroquia junto a toda su familia y, con ella, participara en un ritual ante el cardenal López Rodríguez.
"Esto debió organizarlo Juancito", comentó más de uno de los presentes.
Sin embargo, el alcalde, aunque fue invitado a la fiesta del nacimiento de su propio municipio, no asistió ni envió a nadie para que le representara.
De los regidores, quienes sí atendieron a la invitación fueron Eladio Rodríguez Solís, Fanny Santana y Winston Báez.
Los periodistas llegados de la capital se quedaron esperando a Juancito quien, en la percepción de todos, quedó con su liderazgo disminuido.
Jiménez le dijo a Ciudad Oriental que el alcalde fue invitado con con bastante tiempo de anticipación.
Esa ausencia, sin embargo, es el reflejo de una aparente debilidad del síndico, que gobierna al municipio durante los últimos ocho años.
El pasado día 16 de agosto, durante la celebración de los actos oficiales por la Restauración de la República, la parroquia Santa Mónica en la que fue oficiada una misa solemne auspiciada por la alcaldía, el salón estuvo prácticamente desierto, solo con la presencia de un reducido número de funcionarios.
La actividad de ayer promovida por el contrincante de Juancito, sin ser oficial, logró desbordar el escenario y atraer a oficialistas y a opositores.
Este Manuel Jiménez es un político experimentado y exitoso.
Juancito es un político exitoso que ha hecho una carrera política meteórica.
Los dos saben lo que quieren, pero tienen métodos distintos para conseguir sus propósitos.
Ninguno de los dos ha perdido ni una sola de las batallas políticas a las que se han presentado en este siglo.
Juancito ha sido diputado y alcalde dos veces, puestos ganados en las urnas.
Jiménez, ha sido diputado en tres ocasiones. Nunca ha perdido.
Ninguno de los dos han perdido. Juancito se ampara en su inmensa fortuna. Jiménez lo hace en su inmenso poder de convencimiento.
Por eso, en esta primera y pública batalla, Jiménez logro sentar bajo un mismo techo a aliados y adversarios.
Es posible que Juancito esté ante su peor pesadilla.
Es posible que Juancito esté ante su peor pesadilla.
Uno de los dos tendrá que morder el polvo de la derrota. Ayer en la tarde, con la celebración del Primer Festival de la Cultura y el Deporte por la Identidad, Jiménez mostró un botón respecto de la forma en que pretende hacer campaña en todo e l municipio: llevando arte y cultura unido a propuestas de soluciones, generando esperanzas.
En la campaña electoral del año 2010, Juancito hacía sus "domingos morados", en los que promovía la venta de comestibles a bajos precios, organizaba competencias deportivas y obsequiaban bolsas de comida.
Se apoyaba, además, en el asfaltado de las calles. Era la denominada "política del negrito".
Muchos consideran que fue "el negrito" (el asfalto), quien le dio la victoria a Juancito sobre Tonty Rutinel, quien hizo campaña electoral sin dinero, caminando a pies todo el municipio y solo acompañado con una guagüita anunciadora.
Ayer, quien dio la impresión de ser el alcalde y líder de Santo Domingo Este, no fue el alcalde real, Juan de los santos, sino su rival, Manuel Jiménez.
Esta vez Juancito no se enfrentará a Domingo Páez ni Eladio Martínez, sino a Manuel, un tipo con recursos insospechados que se ampara en sus ideas para hacer política.
Hace poco Ciudad Oriental le comentó a uno de los miembros del debilitado equipo de estrategia de Juancito sobre lo que estaba preparando Jiménez y del crecimiento que este experimenta en el favor de los electores peledeístas.
-"Nosotros lo estamos dejando crecer; cuando esta maquinaria entre en enero, las cosas cambiarán", fue su respuesta.
Otro día, tan pronto como el pasado viernes, le comenté a otro importantísimo líder del sector de Juancito sobre la misma situación, la respuesta fue esta: "Juancito sabe cómo ganar".
Esa respuesta no me convenció a la luz de lo que sucede en las calles.
De todas maneras, se trata de dos políticos exitosos, cada cual con su estilo particular.
Esta vez, uno de los dos será derrotado. Mientras tanto, ayer Manuel Jiménez le dio un golpe de efecto que semeja un puñetazo en plena nariz.
Juancito debe buscar la forma de responder el golpe, cuanto antes, mejor, proque si espera a enero, podría ser tarde.
Ahora bien, el alcalde tiene el problema de que ya no cuenta con el soporte de Mildred Charlot, Julio Santana ni Nelson Ortega y el aporte de Juan López parece en decadencia.
Todos estos, más algunos otros, formaban parte del "petite comite" que trazaba su estrategia y táctica política.
Ahora no se está claro sobre quién la está diseñando.
Y muchos indicios revelan que la estrategia en el lado de Juancito está falta de atención.
Por otra parte, Jiménez ha demostrado que es un tipo resuelto y que no es sumiso a los dictados del Comité Político del PLD.
Aunque es miembro del CC del PLD, no le obedece a ciegas al CP.
"Yo sigo y aplico los estatutos del Partido", me ha comentado Jiménez. Por eso se opuso en forma resuelta a la Barrick Gold y no obedeció la "línea" que le bajaron del CP.
Además, también se ha opuesto a la explotación de loma Miranda componiendo y cantando una canción que se ha convertido en el himno de los ecologistas que defienden esa montaña.
Juancito, hasta ahora, nunca ha sido capaz de plantear una posición al margen de lo que diga el Comité Político y, cuando lo ha hecho, ha regresado sobre sus palabras, como lo hizo recientemente con loma Miranda.
Por Robert Vargas