El presidente de Ghana, John Mahama, disolvió la agencia antidrogas de su país después de los contradictorios reportes sobre un alijo capturado en un aeropuerto de Londres.
La agencia ghanesa dijo que había cooperado con las autoridades británicas en la captura de una ciudadana de ese país africano que había sido detendida con 12,5 kilos de cocaína.
Pero la Alta Comisión Británica en Ghana negó que existiera tal colaboración.
La presidencia del país, mientras, negó las alegaciones de que la detenida tuviera conexiones con la familia del mandatario o que viajara con un pasaporte diplomático.