El expresidente Hipólito Mejía destacó que tiene informes de que ya productores locales de vegetales, aguacates, mangos y otros rubros, están teniendo pérdidas millonarias por la veda de esos productos por parte de Estados Unidos y Haití. Citó como ejemplo el caso de un solo productor que esta semana ha perdido más de un millón de pesos.
Mejía habló con la prensa previo a un encuentro con dirigentes en Barahona. Expresó que es responsabilidad del gobierno resolver lo que calificó un “grave problema”, el cual entiende que se debió al descuido de la vigilancia epidemiológica que debe existir de manera permanente.
Calificó como una debilidad del gobierno que no se hubiese tomado a tiempo los correctivos para evitar que se presentara una situación como esta. Demandó que el gobierno y el sector privado busquen una salida rápida y urgente a la situación.
Mejía manifestó que la medida de Estados Unidos, a la que se han sumado Puerto Rico y Haití, constituye un duro golpe para la economía del país y para los productores agropecuarios.
Sostuvo que lo más aconsejable es darle funcionamiento a organismos departamentales de investigación y prevención sanitaria del Ministerio de Agricultura, para hacer como hizo durante su gobierno, lo que impidió que esta situación se presentara porque existía un departamento técnico para enfrentar eventualidades de esa naturaleza.
Recordó que siendo ministro de Agricultura en el gobierno del presidente Antonio Guzmán tuvo que enfrentar la Fiebre Porcina Africana, teniendo que sacrificar a los cerdos, decisión que tomaron con responsabilidad
Reiteró que el campo dominicano está en pésimas condiciones por la falta de institucionalidad, en la que incluya el desarrollo de una planeación estratégica que incluya buenos programas de extensión, investigación, comercialización y apoyo crediticio a los productores agropecuarios.
Dijo que un país que no cuente con el pilar de la investigación agropecuaria, es una nación que está muy mal, debido a que carece de herramientas adecuadas que permitan proyectar los niveles y calidades de producción futura de acuerdo con un plan de desarrollo del país.
Tampoco podrá aprovechar las innovaciones para mejorar la productividad, y que a la vez le documente sobre el pasado del área.
”El campo no está bien. El café dominicano se perdió en un 80 por ciento. Las variedades del arroz desaparecieron y el cacao, está vivo, gracias al sector privado que ha coadyuvado al desarrollo de ese rubro, así como a los 3 mil 500 millones que le inyecté cuando fui gobierno” recordó.