El senador Charlie Mariotti consideró ayer que no sería racional ni prudente que el pleno del Senado rechace la solicitud del presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario, para que el organismo legislativo suspenda el fondo de gestión social de los senadores hasta que pasen las elecciones.
“Creo que el pleno senatorial debe acatar la solicitud de poner en suspenso el fondo de gestión social”, dijo el representante de Monte Plata, quien, sin embargo, defendió la diafanidad y la necesidad de los que reciben ese servicio, de los miembros de la cámara alta.
Mariotti manifestó que “ni por asomo”, el fondo de gestión senatorial puede definirse como un “barrilito” de los senadores.
Explicó que se trata de un fondo de gestión senatorial que cubre oficinas, porque parte de esos fondos se destinan para mantener oficinas abiertas.
Dijo que durante el predominio del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en el Congreso, en el país nunca hubo las 32 oficinas provinciales para que los senadores atiendan necesidades de la población.
Destacó que eso implica gastos fijos y demanda de recursos.
“Ahora bien, nosotros, ante esta petición de la Junta, aunque el Poder Legislativo es soberano, no debemos oponernos”, subrayó el congresista.
Perjuicios. Sin embargo, Mariotti expresó que la gente debe entender también que la
suspensión del fondo de gestión senatorial causa perjuicios, “porque esas oficinas son una realidad, abiertas con horarios”.
Tras señalar que Ramón Alburquerque fue 16 años senador por Monte Plata, Mariotti dijo que ese legislador nunca tuvo una oficina en esa provincia.
Explicó que el personal de esa oficina, que muchas veces labora hasta las 11:00 de la noche, hace una gran labor de representación, porque responde a necesidades de la gente, de iglesias, familias y entidades cuyas asuntos y problemas son atendidos.
Señaló que a esas oficinas también va gente a protestar y a hacer reclamos, como si fuera el mismo Palacio Nacional.