"Durante siglos, República Dominicana ha sido golpeada. Desde el Gobierno se lleva a cabo una revolución para convertir esa situación crítica en una nueva realidad", destacó el funcionario.
Afirmó que se busca un cambio "no solo desde el punto de vista medioambiental, sino también con el ser humano".
Refirió que habrá un cambio de cultura de malas prácticas por falta de orientación. El fin es que la gente de las zonas intervenidas entienda que vale más cuidar el bosque con este tipo de agricultura.
"Planteamos en tres años lograr más de 750.000 tareas reforestadas. Serán sembradas de árboles que generen una agricultura sostenible en las montañas", agregó.
Los campesinos recibirán el acompañamiento del Gobierno. Serán beneficiados con jornadas de capacitación ambiental. Ganarán 7.800 pesos al mes por sembrar sus propias tierras. De ese modo, podrán sobrevivir mientras obtienen sus cosechas.
Además, serán beneficiados con todas las políticas inclusivas del Gobierno. Entre estas, jornada escolar extendida y titulación de terrenos. Igualmente, el cambio de los pisos de sus viviendas de tierra por cemento.
Domínguez Brito aseguró que unos 6.000 millones de pesos serán invertidos para reverdecer las lomas de Hondo Valle y Juan Santiago, en Elías Piña. De la misma manera, en Sabaneta, San Juan; así como en Las Cañitas y Padre Las Casas, en Azua.
Además, Postrer Río y La Descubierta, en Independencia; Neyba, Bahoruco. La gente de Bohechío, Los Fríos y Montacitos, también será beneficiada.