QUE POLITICA, SANTO DOMINGO.- La dirigente política Minou Tavárez Mirabal cuestionó los pronunciamientos del secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Reinaldo Pared Pérez, de descartar reunirse con los partidos de oposición, bajo el alegato de que su organización no es un relajo y que la ley de partidos políticos deberá consensuarse en el Senado de la República.
La presidenta de Opción Democrática (OD) consideró que esas expresiones de Pared Pérez, presidente del Senado, a nadie sorprenden, porque esas son sus actitudes y su vocación autoritaria, las cuales dijo que pone de manifiesto contra quienes no son del PLD y contra la oposición.
Entrevistada vía telefónica por las periodistas Edith Febles y Amelia Deschamps a través del programa “En La Mira”, que producen por la emisora Fidelity 94.1 FM, Minou expresó que Pared Pérez hace sus declaraciones en un momento inoportuno, cuando el país está crispado por el abuso del ejercicio del poder del PLD.
“Un verdadero demócrata debería estar diciendo y respondiendo a que las circunstancias fueran aprovechadas para avanzar en la consolidación de la democracia, pero él no es un demócrata”, reprochó la exdiputada del partido morado, quien renunció en el 2015 y formó la OD.
Tavárez Mirabal dijo aceptar que la ley de partidos se discuta en el Congreso Nacional, pero entiende que se debería estar en un proceso de que el PLD no aproveche su mayoría y se evite la compra de votos y uso de recursos del Estado para ganar elecciones, como dijo que ha sido su práctica.
“Si no se logra que esa ley sea un instrumento de progreso y construcción de la democracia, estaríamos ante una situación política difícil en el país”, advirtió.
Declaró que por eso es que los partidos de oposición piden que se escuche y se tome en cuenta la opinión de la oposición y de toda la sociedad.
“Yo trabajé 14 años en el proyecto de ley de partidos y la queja de los partidos es que en el Senado de la República y en la Cámara de Diputados lo expresado en las vistas públicas no tuvo resultados”, se quejó la dirigente política opositora.
“En el momento que se tomó en cuenta todas las propuestas y se aprobó un proyecto de ley de partidos y una legislación para que haya un proceso más transparente y democrático, el PLD lo desconoció y se aprobó en la Cámara de Diputados lo que ellos querían, dejando afuera la rendición de cuentas, las condiciones de igualdad en la participación, el financiamiento de las campañas, los debates y el acceso a los medios de comunicación”, recordó Tavárez Mirabal.
Enfatizó que lo más grave que hizo el PLD fue quitarle todas las sanciones al proyecto y dejar solo tres sanciones generales.
Acusó al partido oficial y funcionarios del Gobierno de desconocer la Constitución del país, cuando argumentan que no hay problema de que el presidente Danilo Medina haya ganado con un financiamiento extranjero, porque la ley no lo prohíbe.
Se basó en esas argumentaciones, para sostener que en la ley de partidos se debe incorporar los mecanismos de impunidad para aplicarlos a los candidatos imputados o señalados en actos de corrupción, a fin de censurar su participación en los procesos internos de los partidos y en los procesos electorales.
Abogó porque a los funcionarios vinculados a actos de corrupción o imputados se les impida volver a incursionar a cargos públicos y a incursionar en los procesos políticos, aspecto que dentro de la ley sería lo más novedoso.
Expectativas sobre Odebrecht
Minou Tavárez Mirabal coincidió con el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, en el sentido de que no confiaba en que en el país se haga justicia en el caso de Odebrecht, porque se han dado señales en ese sentido.
Según aseveró, República Dominicana es el país donde menos se ha avanzado en las investigaciones y en el compromiso de castigar a los culpables de dolo y de crímenes de corrupción, que considera son los causantes de las crisis en los hospitales, y que surja uno tras otro.
Según aseveró, República Dominicana es el país donde menos se ha avanzado en las investigaciones y en el compromiso de castigar a los culpables de dolo y de crímenes de corrupción, que considera son los causantes de las crisis en los hospitales, y que surja uno tras otro.