El diputado perremeísta Alfredo Pacheco se puso a la disposición de las autoridades para ser investigado en el caso de Odebrecht, y dijo que va a pedir que le retiren su inmunidad parlamentaria, aunque éste pedido debe hacerlo el pleno de la Cámara de Diputados.
Manifestó que la cárcel es para hombres y que le comunicó a su esposa “que me prepare mis pantalones cortos, porque la cárcel es para hombres”.
El expresidente de la Cámara de Diputados se declaró inocente e indicó que no ha sido requerido por las autoridades judiciales, al ofrecer una rueda de prensa en el Congreso Nacional.
“Si me requieren, solo tienen que decírselo a mi abogado. No tengo miedo, estoy en disposición de las autoridades… “No nos desesperemos que este proceso pinta para largo”.
Dijo que está apoderando a su abogado, Ángel Encarnación, quien ya está en la fiscalía del Distrito Nacional investigando si se ha emitido orden de arresto en su contra.
Dijo que está atravesando por una situación difícil, ya que según afirmó ha sido involucrado “de manera injusta” en el expediente, en el cual tambien él ha estado pidiendo que se haga justicia y se ponga fin a la corrupción e impunidad.
Insistió en que no es un ladrón y que no recibió dinero de la empresa Odebrecht ni de ningún representante de ésta para aprobar proyectos.
Estoy seguro muy seguro que no he sido sobornado. Lo voy a repetir yo Alfredo Pacheco estoy seguro que no he sido sobornado” afirmó al indicar que acudirá a defender su honor.
Desde muy tempranas horas en la mañana han sido detenidas al menos diez personas por el caso de los sobornos pagados en el país por la constructora brasileña Odebrecht. Estos son el exministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, y su yerno Conrad Pittaluga; el ministro de Industria y Comercio, Juan Temístocles Montas; el expresidente del Senado, Andrés Bautista; los exvicepresidentes de la CDEEE, César Sánchez y Radhamés Segura; los exdiputados Ruddy González y Roberto Rodríguez; el exadministrador de Empresas Hidroeléctricas Estatales (EGEHID), Máximo de Oleo y el empresario Ángel Rondón.
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