Dos días antes de fallecer el doctor José Francisco Peña Gómez le pidió un último deseo a Hipólito Mejía, quien se perfilaba como posible presidente de la República para el 2000.
Es el mismo Mejía quien nos revela en qué consistió ese pedido, luego de 18 años de su triunfo como presidente de la República.
“Peña Gómez, dos días antes de morir, en su habitación de San Cristóbal, tomó un pequeño papelito, papel traza, y me puso diez personas con los cargos que debían ocupar, y yo cumplí al pie de la letra eso”, precisó el mandatario para el periodo 2000-2004, en entrevista con Fernando Quiroz.
Entre los nombres de la lista que señala Mejía, figuran la doctora Milagros Ortiz Bosch, como vicepresidenta de la República; Hugo Tolentino Dipp, canciller, “etcétera, etcétera, etcétera”.
En una larga conversación, desde su escritorio en oficina privada, Mejía afirma que fue respetuoso de su compromiso con Peña Gómez, y lo sigue siendo. Conserva, dijo, el papel le entregó el fenecido líder.
Peña Gómez, líder histórico del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), tres veces candidato presidencial de la República (1990, 1994 y 1996) falleció el 10 de mayo de 1998 a causa de un cáncer estomacal, luego de casi cuatro décadas de lucha por democracia, y ser víctima de ataques racistas por su color negro.
Su denuncia de fraude electoral en el 1994 en favor del entonces presidente Joaquín Balaguer, provocó una crisis electoral que derivó en la reducción del período presidencial, y nuevas elecciones en el 1996, cuando fue derrotado en segunda vuelta por Leonel Fernández, presentado por la alianza de los rivales Balaguer, del PRSC y Bosch, del PLD.
Para las elecciones legislativas y municipales del 16 de mayo de 1998 el PRD logró la gran mayoría de las posiciones, incluyendo la alcaldía de Santo Domingo, ganada por el merenguero Johnny Ventura. Estos resultados fueron considerados un homenaje a la memoria de Peña Gómez, quien seis días antes había fallecido siendo el candidato a ese cargo, buscando solución a un conflicto de grupos internos.
Mejía ganó por el PRD las elecciones presidenciales del 16 de mayo de 2000, venciendo a Danilo Medina, candidato del entonces oficial Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y gobernaba Leonel Fernández, su primer periodo 1996-2000.
Mejía fundó junto a Luis Abinader y a numerosos dirigentes que salieron o fueron expulsados del PRD el Partido Revolucionario Moderno (PRM).
Para las elecciones de mayo de 2016 el PRM, con Abinader como candidato presidencial, y Carolina Mejía, hija Hipólito Mejía, fue derrotado por Danilo Medina, quien logró reelegirse y gobernará hasta el 16 de agosto de 2020.
El PLD y aliados obtuvieron 2, 847,414 para un 61.74%, y el PRM y aliados 1, 613,207 para un 34.98% de los votos a nivel presidencia.
El PRD sigue bajo el liderazgo de Miguel Vargas, y participó aliada al PLD en las elecciones pasadas, luego de 43 años de antagonismos.
Obtuvo 270,445 sufragios equivalentes al 5.86% de los votaciones, reduciendo su caudal de votos casi en 40% en comparación a elecciones anteriores (46.95 en el 2012).
Lista de los 10
A las 9:00 de la mañana, puntual a la entrevista, saludando con su peculiar estilo y rodeado de asistentes, llegó Mejía con su icónica chabacana. Esta entrevista es inédita, realizada hace varios meses, producto de una investigación periodística.
“Esa lista fue un deseo de Peña Gómez y eso no lo he dicho casi nunca. Tengo el papelito guardado, pero el papelito podía guardarse o yo botarlo y decir que no. Yo lo guardé y cumplí con eso. Esa fue la última vez que conversé con él”, dijo el ex gobernante.
Y agregó: “Al otro día él salió para Baní a un recorrido. Yo no acostumbraba cuando había un recorrido, que era él el jefe, yo no acostumbraba a meterme en el medio, e igual que los viajes, él iba en por un lado y yo me metía en otro porque el ‘tumbapolvismo’ a mí nunca me ha gustado, ni dando ni que me lo den, y segundo yo no soy de los come líderes, yo tengo que estar presente ahí quitando sillas…”
Considera que en el país hay gente que tiene el síndrome de dar empujones porque su silla tiene que estar delante, y él nunca ha tenido ese problema.
“En los recorridos casi nunca yo iba con él (Peña Gómez), yo me quedaba detrás a ver la reacción de la gente a ver qué hacían: si hacían muecas. Yo prefería hacer esas evaluaciones y nunca andaba tumbando polvo”
Experiencia de gestión
Como experiencia de su gobierno recuerda las limitaciones presupuestarias, de necesidades de 500,000 millones y solo se disponía de 100,000 millones.
“Y el robo, maldito robo y la corrupción de los que Peña era enemigo y yo soy enemigo a muerte. Yo cumplí al pie de la letra con su compromiso con la sociedad dominicana de enfrentar a los corruptos viniese de donde viniesen. A mí no me tembló el pulso para actuar”, sostuvo.
Prioridades
Las prioridades en un país como República Dominicana son educación, salud, alimentación y vivienda, recuerda Mejía, tras indicar que no hay más posibilidades.
Insistió que lo que el país necesita es preparar a su gente, alimentarla, enfrentar el problema de la vivienda y de la seguridad alimentaria.