SANTO DOMINGO.-El presidente de Alianza por la Democracia (APD), Max Puig, dijo que la construcción de las plantas a carbón de Punta Catalina es un negocio del presidente de la República Danilo Medina Sánchez y su gobierno, ya que todo lo que se ha dicho sobre esta es una mentira para confundir al pueblo dominicano.
Max Puig expresó que no hay manera de ocultar el fraude que hizo el gobierno con Odebrecht, debido a que es un secreto a voces las artimañas que se realizaron para que la constructora brasileña obtuviera el contrato de Punta Catalina.
Entrevistado por el periodista Salvador Holguín en el programa “Lo Que Otros Callan” que se transmite por Teleradio América canal 45 y 12 del cable a las 3 PM, el dirigente político Puig, indicó que lo que hay que hacer con el informe de la comisión designada por el mandatario Medina Sánchez para evaluar la sobrevaluación de las plantas a carbón, es tirarlo al zafacón porque se ha demostrado que fue una farsa.
“Al principio las plantas iban a ser construidas en Hatillo Azua, en el mismo lugar que el expresidente Leonel Fernández iba a construir unas plantas a carbón, pero cuatro semanas antes de comenzar la edificación el Ejecutivo Medina decidió cambiar la localización para favorecer a Odebrecht”, expresó Max.
Asimismo, el también sociólogo explicó que el cambio de ubicación del proyecto de las plantas a carbón de Hatillo, Azua, a Punta Catalina, Baní, afectó la capacidad de oferta de algunos de los participantes en la licitación que hizo la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), lo que provocó que Odebrecht fuera la única empresa constructora con las cualidades necesarias para realizar la obra.
El político Max Puig afirmó que las sobrevaluaciones de Punta Catalina oscilan entre 500 y 600 millones de dólares, por lo que no es cierto que el Poder Ejecutivo haya conseguido una rebaja en el contrato; “lo único que hizo Danilo fue exonerarle impuestos a Odebrecht para que el país creyera que la obra había bajado de costo” manifestó en torno a asegurar que el proyecto es un negocio del presidente.