La desesperación, las codicias de poder y las nimiedades que caracterizan a los políticos cuando están fuera del tren gubernamental tienen a más de uno actuando arrebatadamente.
La historia se repite nuevamente, lo pasado en el año 2012 en el glorioso partido de José Francisco Peña Gómez hoy se asoma a las puertas de los principales partidos de oposición.
La diferencia de lo sucedido con lo que pueda suceder, es que en el pasado se supieron jugar las cartas y ahora se están mostrando todas las ases antes de acabar la partida.
Con una facción del partido oficialista buscando insistentemente un traje a la medida con la nueva Ley de Partidos y Electoral y una oposición actuando por impulsos, emociones y bajo un llamado “bloque opositor” que no va más allá de una rueda de prensa grupal, es poco lo que se podrá lograr.
Las primeras abiertas son la manzana podrida y solo un grupo se atreve a comérsela. El mismo grupo que ya fue acusado de comerse el tiburón aquél.
Si el dichoso bloque de oposición no toma medidas más drásticas para presionar al gobierno, ya podemos dar por sentadas y proclamadas las primarias abiertas en la nueva ley.
Por Yeison Mateo