QUE POLÍTICA, SANTO DOMINGO.-El Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) y la Agencia de Cooperación del Japón (JICA) lanzaron el catálogo en la metodología D-Hope en Montecristi, que busca promover y expandir el emprendimiento basado en el desarrollo de las comunidades.
D-Hope es una metodología creada por la JICA que promueve el emprendimiento basado en el desarrollo de las comunidades, con el objetivo de que los emprendedores pueden ser la fuente de trabajo de su propia comunidad, incentivándolos a desarrollar pequeños negocios que sirvan de sustento y eviten las migraciones a la ciudad.
Algunas características del programa son incrementar el nivel del desarrollo humano y sentido de utilidad, y destacar la oferta local, tales como recursos naturales y humanos, así como mejorar la experiencia de asociatividad local y desarrollar la capacidad comunitaria para implementar políticas de mayor valor agregado y mejor bienestar.
El viceministro de Fomento a las Mipymes, Ignacio Méndez, destacó la iniciativa y expresó que las poblaciones tienen muchos recursos, desconocidos fuera del territorio, por lo que en ocasiones no pueden ser explotados, recoge una nota de la Dirección de Comunicaciones del MICM.
En una videoconferencia en la que participaron decenas de representantes de varios sectores, añadió que en ocasiones los mismos emprendedores desconocen el valor de su activo, y mediante la metodología D-Hope se promueve el acceso de los productores locales a mercados, así como la dinamización de la economía local.
Dijo que la iniciativa se basó en la creación y desarrollo de una oferta amplia de bienes y servicios que la provincia Montecristi puede ofrecer, y la construcción de una plataforma de mercadeo en la que se puedan visibilizar sus productos, aprovechar sus recursos locales y autóctonos de manera sostenible y generar elementos con identidad comunitaria.
Detalló algunos productos que se pueden encontrar en Montecristi, tales como orégano, miel, helados, artesanía, maíz caquiao, pellizas, así como bisutería, variedad de manualidades, entre otros.“Muchos solo conocen a Montecristi por las salinas, otros por el Morro o el reloj del parque central, pero el catálogo contiene 55 experiencias vivenciales que se pueden encontrar en todos sus municipios, comenzando por San Fernando y siguiendo por Las Matas de Santa Cruz, Villa Vásquez, Guayubín, Pepillo Salcedo y Castañuelas, entre otros”, resaltó Méndez.
El funcionario expresó que se realizaron varias capacitaciones junto a técnicos de JICA, junto a líderes locales, autoridades y la iniciativa forma parte de lo que se quiere lograr en diversas localidades del país.
Takayuki Kondo, representante residente de la JICA, resaltó la cooperación de este organismo en el desarrollo de las mipymes y las comunidades locales para el mejoramiento de la calidad y productiva del sector.
Señaló que D-Hope y OVOP son iniciativas que promueven el dinamismo local, así como la participación de la mujer en ese renglón.
Aclaró que D-Hope es una metodología creada por la JICA que ya se ha implementado en países del este de Europa, el sudeste de Asia y en América Latina, mientras OVOP es un programa de alcance nacional y local que impulsa la creación de oportunidades de negocios en comunidades rurales a través del desarrollo de uno o más recursos originarios.
La actividad fue moderada por Ana Abreu, analista de la Red Nacional de Emprendimiento del MICM, quien a su vez, tuvo la presentación del catálogo.
La iniciativa se lleva a cabo con el apoyo de diversas instituciones locales, líderes comunitarios y del sector productivo de Montecristi, así como los centros mipymes del país.