QUE POLITICA, SANTO DOMINGO.- El sector pesquero enfrenta retos importantes, diferenciables a nivel territorial, que requieren una mayor inversión con miras a la reconversión hacia la pesca de mayor tecnificación y la acuicultura, lo que permitirá una mayor cobertura de la demanda y consumo nacional.
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Así lo indica la más reciente entrega del Monitor de la Frontera, publicación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, dedicada al análisis sobre un aspecto particular de política pública en la zona fronteriza; lo cual permite orientar la focalización de intervenciones en el territorio, en atención a su condición relativa de menor desarrollo.
El Monitor de la Frontera puntualiza que anualmente, en la República Dominicana la actividad promedia 14,640 toneladas (FAO, 2016), con una contribución promedio al Producto Interno Bruto del 2.8% por captura y producción pesquera, del renglón agricultura, silvicultura y pesca.
A nivel nacional, la actividad pesquera se desarrolla en 17 provincias costeras y 205 puertos de desembarque utilizados para la pesca en sus distintas modalidades.
Señala que la forma de realizar la pesca en Montecristi y Pedernales se caracteriza por ser bastante rudimentaria en comparación con otras provincias.
El informe de la Dirección de Planificación y Desarrollo de la Zona Fronteriza alerta sobre una limitada tenencia de insumos para efectuar la actividad.
Especifica que en el territorio, el 69.78% de los pescadores indicó que realizaba la captura mediante una embarcación y de estos, el 63.62% usaba embarcaciones prestadas o pertenecientes a una pescadería.
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Este uso es muy inferior a otras provincias de menor actividad pesquera como La Romana o Peravia, donde más del 90% de los pescadores utilizan embarcaciones.
Sostiene que en la zona fronteriza predomina el uso de embarcaciones en condición deficiente, destacando que 45 de cada 100 embarcaciones utilizadas se encontraba en mal estado o requerían mejoras significativas (42 de cada 100 a nivel nacional), lo que posiblemente tenga incidencias negativas en la productividad del sector.
La investigación señala las características de los actores que participan en la actividad pesquera en Montecristi y Pedernales, puntualiza que los actores dedicados a la actividad presentan altos niveles de vulnerabilidad como consecuencia de los bajos niveles de escolaridad, el limitado acceso a seguridad social y la baja asociatividad. Los pescadores poseen menos de 6 años de escolaridad y presentan brechas cognitivas (bajo nivel de entrenamiento). Adicionalmente, el pescador o patrono fronterizo, experimenta más carencias de seguro de salud que los pescadores en otras provincias con menos presencia en esta actividad económica.
El informe resalta que la participación de la mujer en la actividad pesquera es reducida, tanto a nivel nacional como en el territorio fronterizo. En Montecristi y Pedernales, sólo el 1.07% de quienes se dedican a la pesca son mujeres.
La investigación fue realizada en base a datos del Primer Censo Nacional Pesquero 2019, coordinado por la Oficina Nacional de Estadística, el Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura (CODOPESCA) y el Banco Interamericano de Desarrollo.
Adicionalmente, en cuanto a la dificultad de comercialización, un 27.84% de los pescadores de la zona fronteriza indicó haber tenido dificultades. Especifica que particularmente en Pedernales esta situación fue más acentuada 37.34%.
Entre sus recomendaciones, la investigación especifica la creación de programas focalizados y políticas que faciliten el acceso al crédito incentivando las mejoras en el sector, tanto de las embarcaciones utilizadas, como también la especialización de la población y la industrialización del sector pesquero.
Así lo indica la más reciente entrega del Monitor de la Frontera, publicación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, dedicada al análisis sobre un aspecto particular de política pública en la zona fronteriza; lo cual permite orientar la focalización de intervenciones en el territorio, en atención a su condición relativa de menor desarrollo.
El Monitor de la Frontera puntualiza que anualmente, en la República Dominicana la actividad promedia 14,640 toneladas (FAO, 2016), con una contribución promedio al Producto Interno Bruto del 2.8% por captura y producción pesquera, del renglón agricultura, silvicultura y pesca.
A nivel nacional, la actividad pesquera se desarrolla en 17 provincias costeras y 205 puertos de desembarque utilizados para la pesca en sus distintas modalidades.
Señala que la forma de realizar la pesca en Montecristi y Pedernales se caracteriza por ser bastante rudimentaria en comparación con otras provincias.
El informe de la Dirección de Planificación y Desarrollo de la Zona Fronteriza alerta sobre una limitada tenencia de insumos para efectuar la actividad.
Especifica que en el territorio, el 69.78% de los pescadores indicó que realizaba la captura mediante una embarcación y de estos, el 63.62% usaba embarcaciones prestadas o pertenecientes a una pescadería.
Este uso es muy inferior a otras provincias de menor actividad pesquera como La Romana o Peravia, donde más del 90% de los pescadores utilizan embarcaciones.
Sostiene que en la zona fronteriza predomina el uso de embarcaciones en condición deficiente, destacando que 45 de cada 100 embarcaciones utilizadas se encontraba en mal estado o requerían mejoras significativas (42 de cada 100 a nivel nacional), lo que posiblemente tenga incidencias negativas en la productividad del sector.
La investigación señala las características de los actores que participan en la actividad pesquera en Montecristi y Pedernales, puntualiza que los actores dedicados a la actividad presentan altos niveles de vulnerabilidad como consecuencia de los bajos niveles de escolaridad, el limitado acceso a seguridad social y la baja asociatividad. Los pescadores poseen menos de 6 años de escolaridad y presentan brechas cognitivas (bajo nivel de entrenamiento). Adicionalmente, el pescador o patrono fronterizo, experimenta más carencias de seguro de salud que los pescadores en otras provincias con menos presencia en esta actividad económica.
El informe resalta que la participación de la mujer en la actividad pesquera es reducida, tanto a nivel nacional como en el territorio fronterizo. En Montecristi y Pedernales, sólo el 1.07% de quienes se dedican a la pesca son mujeres.
La investigación fue realizada en base a datos del Primer Censo Nacional Pesquero 2019, coordinado por la Oficina Nacional de Estadística, el Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura (CODOPESCA) y el Banco Interamericano de Desarrollo.
Adicionalmente, en cuanto a la dificultad de comercialización, un 27.84% de los pescadores de la zona fronteriza indicó haber tenido dificultades. Especifica que particularmente en Pedernales esta situación fue más acentuada 37.34%.
Perspectivas y recomendaciones
La publicación sobre la actividad pesquera en la zona fronteriza, señala que a nivel nacional el potencial de industrialización se encuentra limitado por la baja disponibilidad de peces demersales, que posibilitarían mayor explotación del recurso. “Como resultado más del 70% del consumo local es abastecido a través de las importaciones”, precisa.Entre sus recomendaciones, la investigación especifica la creación de programas focalizados y políticas que faciliten el acceso al crédito incentivando las mejoras en el sector, tanto de las embarcaciones utilizadas, como también la especialización de la población y la industrialización del sector pesquero.