Solo EGEHID, genera ingresos anuales que oscilan entre los 100 y 200 millones de dólares, dependiendo de si el año es seco o húmedo, mientras que las demás hidroeléctricas del país, como Tavera-Bao, Jiguey, Valdesia, Monción, Hatillo, Sabaneta, Sábana Yegua, superan los 500 millones de dólares, en ingresos a las arcas nacionales, las que además de generar electricidad, estas infraestructuras, proveen el agua necesaria para el consumo humano a través de los acueductos y satisfacer las necesidades de regadío de precios agrícolas.
La venta de acciones de EGEHID, a empresarios enquistados en el poder directa e indirectamente, pone en riesgo la seguridad hídrica de los dominicanos para fines de agua potable y regadío, lo que significaría, una enajenación del patrimonio nacional, peor al ocurrido en la capitalización de los años 98 y 99, con ese despropósito, se estaría penalizando el bienestar de las presentes y futuras generaciones, solo para favorecer a empresarios buitres que medran los bienes públicos, para enajenarlos.
Para la organización de la sociedad civil, resulta paradójico que siendo la empresa de generación hidroeléctrica rentable, el director de Presupuesto haya dicho “va a salir”, porque, el interés del Estado es que todo aquello que no genere facilidades de manejo de riqueza, que sea más una carga, “es salir de eso”, sin embargo, la empresa en su publicación del mes de septiembre del año en curso, establece que los activos corrientes de la empresa, suman RD$81,394.6 millones y sus activos fijos RD$96,396.9 millones, para un total de RD$177,791.6 millones, por lo que rechazamos la venta de esas acciones. Terminó diciendo el vocero de ADOCCO.