QUE POLITICA, SANTO DOMINGO.- Rafael Sánchez Cárdenas, titular de la Secretaría de Salud del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), calificó como inaceptable e inconcebible que las autoridades de Migración se metan a los hospitales a sacar parturientas haitianas, porque se les está negando un derecho universal.
El exministro de Salud Pública manifestó que los hospitales y los médicos no están para cumplir labores de migración ni de fronteras, ese no es su papel.
Expresó que si el gobierno quiere regular el asunto de los inmigrantes haitianos deben buscarlos en otro lugar que no sean los hospitales y aplicar lo que estipulan las leyes dominicanas.
“La salud es un derecho universal y no deben poner a los médicos y enfermeras a decidir si pueden o no atender a una persona por su condición migratoria en el país”, precisó el miembro del Comité Central en declaraciones reseñadas por la Secretaría de Comunicaciones del PLD.
Al ser cuestionado en el Programa Matinal 5 en torno a la situación actual de la Covid -19 en el país, el dirigente peledeísta dijo que en República Dominicana la letalidad ha bajado, lo que es natural debido a que ya se han vacunado 5.5 millones de dominicanos.
“Vamos a tener un pandemónium. Qué podemos esperar con mucho dinero en las calles en diciembre, apertura total y un flujo enorme de personas, que son condiciones especiales para los contagios”, enfatizó.
Sin embargo, Rafael Sánchez Cárdenas consideró que el gran dilema es que todavía hay 6.8 millones de dominicanos que tienen una sola dosis, lo que es una franja bastante susceptible para el país.
“Ha sido una insistencia permanente de nuestra parte que el target de las políticas públicas del plan de vacunación tienen que ser esos 6.8 dominicanos que tienen una dosis, por lo tanto no son opuestos a la vacunación. Entonces el gobierno debe salir detrás de ellos, haciendo jornadas casa por casa”, agregó.
Expresó que el Ministerio de Salud Pública cometió un error al llamar a la población a aplicarse una tercera dosis y luego a vacunar a los niños menores de 11 años, en un momento en el que el plan de vacunación se ejecutaba de manera exitosa y la gente se mostraba entusiasmada.
“Ahí se generó una suerte de dudas y desconfianza y se desvió del camino de una estrategia que debió machacarse desde principio al final hasta lograr que todos tuvieran las dos dosis, que era el objetivo principal”.
Rafael Sánchez Cárdenas señaló que la amenaza para el país es el aumento de la positividad que se ha registrado en las últimas semanas.
Reiteró que es necesario reorientar la política de salud para evitar el aumento de los casos de contagio por COVID-19, porque ahora viene navidad, que es una época donde se incrementan las reuniones familiares y llegan más turistas al país.
Indicó que es poco lo que el gobierno está haciendo en cuanto a vigilancia epidemiológica e intervenciones de salud pública, por lo que es necesario poner atención a esos aspectos.
El exministro de Salud Pública manifestó que los hospitales y los médicos no están para cumplir labores de migración ni de fronteras, ese no es su papel.
Expresó que si el gobierno quiere regular el asunto de los inmigrantes haitianos deben buscarlos en otro lugar que no sean los hospitales y aplicar lo que estipulan las leyes dominicanas.
“La salud es un derecho universal y no deben poner a los médicos y enfermeras a decidir si pueden o no atender a una persona por su condición migratoria en el país”, precisó el miembro del Comité Central en declaraciones reseñadas por la Secretaría de Comunicaciones del PLD.
Al ser cuestionado en el Programa Matinal 5 en torno a la situación actual de la Covid -19 en el país, el dirigente peledeísta dijo que en República Dominicana la letalidad ha bajado, lo que es natural debido a que ya se han vacunado 5.5 millones de dominicanos.
“Vamos a tener un pandemónium. Qué podemos esperar con mucho dinero en las calles en diciembre, apertura total y un flujo enorme de personas, que son condiciones especiales para los contagios”, enfatizó.
Sin embargo, Rafael Sánchez Cárdenas consideró que el gran dilema es que todavía hay 6.8 millones de dominicanos que tienen una sola dosis, lo que es una franja bastante susceptible para el país.
“Ha sido una insistencia permanente de nuestra parte que el target de las políticas públicas del plan de vacunación tienen que ser esos 6.8 dominicanos que tienen una dosis, por lo tanto no son opuestos a la vacunación. Entonces el gobierno debe salir detrás de ellos, haciendo jornadas casa por casa”, agregó.
Expresó que el Ministerio de Salud Pública cometió un error al llamar a la población a aplicarse una tercera dosis y luego a vacunar a los niños menores de 11 años, en un momento en el que el plan de vacunación se ejecutaba de manera exitosa y la gente se mostraba entusiasmada.
“Ahí se generó una suerte de dudas y desconfianza y se desvió del camino de una estrategia que debió machacarse desde principio al final hasta lograr que todos tuvieran las dos dosis, que era el objetivo principal”.
Rafael Sánchez Cárdenas señaló que la amenaza para el país es el aumento de la positividad que se ha registrado en las últimas semanas.
Reiteró que es necesario reorientar la política de salud para evitar el aumento de los casos de contagio por COVID-19, porque ahora viene navidad, que es una época donde se incrementan las reuniones familiares y llegan más turistas al país.
Indicó que es poco lo que el gobierno está haciendo en cuanto a vigilancia epidemiológica e intervenciones de salud pública, por lo que es necesario poner atención a esos aspectos.