“Si me quieren condenar de eso, que me condenen, pero yo soy enemigo de la retaliación, no solamente con los presidentes, también con la gente que ha tenido cargos importantes”, manifestó.
Al ser abordado por la prensa durante su participación en la misa con motivo al aniversario de la creación del Tribunal Superior Electoral (TSE), Mejía aseguro que respeta a los jefes de Estados, como fue el caso de Juan Bosch y Balaguer, a quienes les nombró a sus familiares y allegados en el Estado.
“Yo iba a la casa de Bosch cada 15 días, le nombramos los hijos, los nietos, los choferes y a Balaguer igual”, afirmó el exprimer mandatario.
Señala RNN que el también miembro del Partido Revolucionario Moderno (PRM), señaló que a los que hayan ostentado este cargo se les debe dar privilegios y que esta es una convicción “muy personal” que aplicó.
Asimismo, sostuvo que la persecución a los presidentes en Perú, Centro América, Colombia, entre otros países, es un “problema mortal”.
“Yo respete mis presidentes, los respete a todos, aunque fueran mis contarios, incluyendo a Leonelito”, expresó.
En ese mismo orden, Mejía dijo que la retaliación desestabiliza a los países y agregó que, aunque no es una posición “que es muy jurídica”, es “su sentimiento y actuación”.
El expresidente ofreció estas declaraciones al ser cuestionado sobre si estaba a favor del Ministerio Público independiente y la persecución de dirigentes políticos.