Serguéi Lavrov, ministro ruso de Exteriores, aseguró este lunes que en las capacidades
militares de Rusia está poder responder al suministro de aviones de combate
F-16 a Ucrania, una de las nuevas propuestas que la Casa Blanca, la Unión
Europea y los aliados de Kiev tiene como un plan válido para la contraofensiva
para Moscú. Hasta el momento, los ucranianos no tiene este tipo de cazas en su
arsenal, pero sus pilotos ya están siendo entrenados en su manejo.
La semana pasada, tras la última reunión del Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, Estados Unidos, Dinamarca y los Países Bajos decidieron comenzar en las próximas semanas a diseñar un sistema de entrenamiento para el manejo de cazas F-16, por lo que la llegada de los cazas a suelo ucraniano es cada vez una realidad que una posibilidad que ha generado la incomodidad de Moscú.
Por lo que Lavrov, tachó la entrega de los aliados occidentales de aviones cazas F-16 a Ucrania como una escalada inaceptable. De acuerdo a las del jefe de la diplomacia del Kremlin, estas acciones militares son inaceptables en medio de la guerra iniciada por Rusia. En cuanto a nuestra reacción, no tengo ninguna duda de que nuestras fuerzas armadas sí tienen capacidades para reaccionar ante esto”, dijo este lunes.
El ministro afirmó que estos países aliados de Ucrania en Europa son los que cumplen sobre el terreno la tarea que ha planteado Estados Unidos: debilitar a Rusia y asestarle una derrota estratégica. “Se refieren a una partición de Rusia (…) Es jugar con fuego. Sin duda alguna. Confío en que las personas sensatas finalmente comenzarán a dejar de apoyar de manera incondicional al régimen neonazi que Occidente creó”, dijo.
Indica El Diario NY que aunque desde la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que su homólogo de Ucrania, Volodímir Zelenski, y su Ejército no usará los cazas de combate F-16 de fabricación estadounidense contra objetivos dentro del territorio de Rusia.
La semana pasada, tras la última reunión del Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, Estados Unidos, Dinamarca y los Países Bajos decidieron comenzar en las próximas semanas a diseñar un sistema de entrenamiento para el manejo de cazas F-16, por lo que la llegada de los cazas a suelo ucraniano es cada vez una realidad que una posibilidad que ha generado la incomodidad de Moscú.
Por lo que Lavrov, tachó la entrega de los aliados occidentales de aviones cazas F-16 a Ucrania como una escalada inaceptable. De acuerdo a las del jefe de la diplomacia del Kremlin, estas acciones militares son inaceptables en medio de la guerra iniciada por Rusia. En cuanto a nuestra reacción, no tengo ninguna duda de que nuestras fuerzas armadas sí tienen capacidades para reaccionar ante esto”, dijo este lunes.
El ministro afirmó que estos países aliados de Ucrania en Europa son los que cumplen sobre el terreno la tarea que ha planteado Estados Unidos: debilitar a Rusia y asestarle una derrota estratégica. “Se refieren a una partición de Rusia (…) Es jugar con fuego. Sin duda alguna. Confío en que las personas sensatas finalmente comenzarán a dejar de apoyar de manera incondicional al régimen neonazi que Occidente creó”, dijo.
Indica El Diario NY que aunque desde la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que su homólogo de Ucrania, Volodímir Zelenski, y su Ejército no usará los cazas de combate F-16 de fabricación estadounidense contra objetivos dentro del territorio de Rusia.