Para el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la destrucción de la presa de Kajovka, de la que Rusia y Ucrania se acusan mutuamente, es una prueba de la "brutalidad de la guerra de Rusia en Ucrania".
"La destrucción hoy de la presa de Kajovka pone en peligro a miles de
civiles y causa graves daños medioambientales", subrayó el político
noruego a través de su perfil en Twitter.
Según indicó, "se
trata de un acto indignante" que "demuestra una vez más la brutalidad de
la guerra de Rusia en Ucrania".
"Estoy consternado por el
ataque sin precedentes a la represa de Kajovka. La destrucción de
infraestructura civil es claramente un crimen de guerra, y haremos que
Rusia y sus representantes rindan cuentas", señaló, poco antes y también
en un tuit, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Acusaciones cruzadas entre Ucrania y Rusia
Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de la destrucción parcial de
la represa, tras la voladura de la estructura superior de la presa, un
acto que ha provocado inundaciones de pueblos próximos y la evacuación de
residentes de la zona.
"El objetivo de los terroristas es evidente: crear obstáculos para las
acciones ofensivas de las fuerzas armadas" ucranianas, estimó Mijailo
Podolyak, consejero de la presidencia de Ucrania.
Las
autoridades instaladas por Moscú en la región de Jersón, en el sur de
Ucrania, acusaron por su lado a Kiev de haber llevado a cabo "múltiples
ataques" en la represa.
Construida en 1956 durante la época
soviética, la represa hidroeléctrica de Kajovka permite enviar agua al
canal de Crimea del Norte, que arranca en el sur de Ucrania y atraviesa
toda la península de Crimea, ocupada y anexionada por Moscú desde 2014.
Río arriba de la estructura se encuentra el embalse de
Kajovka, un depósito de agua artificial formado en el río Dniéper, de 240
km de largo y hasta 23 km de ancho. La destrucción de la represa podría
causar importantes dificultades en el abastecimiento de agua de Crimea, un
territorio que Kiev quiere recuperar.
Evacuaciones, según rusos y ucranianos
Según Kiev, "unas 16.000 personas se encuentran en zona crítica",
amenazada de inundación, mientras que Moscú estimó que 14 localidades, en
las que residen "más de 22.000 personas", se encuentran en dicha
situación, si bien el panorama está "enteramente bajo control".
Según
DW
las autoridades impuestas por Rusia en la localidad ucraniana de Nueva
Kajovka declararon el estado de emergencia en la ciudad. La medida entró
en vigor a las 12.00 hora local (9.00 GMT), según el alcalde de Nueva
Kajovka, Vladimir Leontiev.