Crecen los temores sobre la salud de la mayor economía de Europa. El viernes, el instituto Destatis destacó que el crecimiento económico de Alemania fue del 0 por ciento entre abril y junio de 2023, tras haber disminuido sucesivamente un 0,4 por ciento y un 0,1 por ciento en los dos trimestres anteriores. La cifra fue peor de lo esperado por los analistas encuestados por la empresa de datos financieros FactSet, que apostaban por un repunte más fuerte, del 0,3 por ciento.
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Estos resultados no ayudan a disipar las dudas sobre el estado de la economía alemana, muy afectada por la invasión rusa de Ucrania y la consiguiente subida de los precios de la energía. Alemania podría terminar el año en números rojos, en la cola de los países de la eurozona, según analistas. El Gobierno de Olaf Scholz sigue previendo un crecimiento del PIB del 0,4 por ciento anual, pero esta proyección de abril podría cambiar en otoño.