Las proyecciones de los medios de comunicación otorgan al magnate republicano una ventaja de dos cifras frente a Haley: con el 91% escrutado se registraban porcentajes respectivos del 54.6% y 43.1%, de acuerdo con The New York Times.
Si bien en las primarias de New Hampshire se reparten solo 22 delegados de los 2,429 que participarán en el mes de julio en la Convención Nacional Republicana, donde se alzará el candidato presidencial, la contienda con más relevancia y una prueba para el poder de convocatoria de Haley, que sigue en la batalla.
La exembajadora esperaba obtener un resultado fuerte en el estado, donde los electores independientes y moderados forman más de la mitad de los votantes.
Aunque Haley logró más votos de los esperados, su propuesta de campaña no logró calar entre los electores republicanos, consiguiendo un 25% de los apoyos, según una encuesta a pie de urna publicada por la cadena CNN.
Trump revitalizado
El republicano, rodeado de sus más apasionados seguidores, entre ellos el senador de Carolina del Sur Tim Scott y la legisladora Marjorie Taylor Greene, Trump se burló de Haley, llamándola impostora: “Tenía que ganar aquí y perdió, le fue muy muy mal”.Decenas de sus seguidores apostados en el lobby del hotel Sheraton de Nashua, lugar donde la campaña del exmandatario alquiló un salón de eventos, escucharon esperanzados el discurso de victoria de Trump.
“¡Vamos a recuperar la Casa Blanca!”, gritó Dan, un carpintero de 55 años, residente de esa localidad y que se acercó al hotel vestido con una camisa y gorra rojas, decoradas con el eslogan de campaña de Trump Make America Great Again (Hagamos a EE.UU. grande otra vez).