Azua.- Luego de tres días de capacitación en las comunidades pertenecientes
de la región de Sur, de Pueblo Viejo, Padres Las Casas y Sabana Yegua, los
Centros Tecnológicos Comunitarios (CTC)
entregaron 603 certificaciones a jóvenes en Azua, quienes se formaron en el
programa Impacto Workshop que provee de herramientas y técnicas para que estos
mejoren sus habilidades digitales, tecnológicas e informáticas.
El director de los CTC, Isidro Torres, puntualizó que estas capacitaciones contribuyen a desarrollar estrategias en los jóvenes para que construyan una mentalidad de emprendurismo, al tiempo que se les facilita las técnicas que permitan a cada participante ser más productivo e incorporarse al mercado laboral.
$ads={1}
“En el día de hoy llegamos a este evento donde se entregan a jóvenes certificados por su participación en los cursos impartidos, y esto cuesta semanas de esfuerzo y de recorrer los distintos centros como forma de llevar la inducción de las diferentes acciones formativas impartidas”, dijo Torres.
Recordó que acompañó al presidente Luís Abinader en San Juan al evento que organizó el Gabinete de Políticas Sociales, a través de su coordinador, Tony Peña Guaba, y del programa Oportunidad 14-24, y que fue un orgullo que muchos de los jóvenes allí presentes pertenecieran a los distintos CTC que tiene la región Sur.
A juicio de Torres todos los jóvenes que han pasado por los CTC, han recibido la currícula formativa y que eso es fundamental, pues ese programa tiene por objetivo rescatar a jóvenes que ni trabajan, ni estudian y que no están actualizados con los requerimientos del mercado laboral en la parte tecnológica.
“Hoy estamos en lo que es la región Sur 1, que involucra a Sombrero, Bohechío, Sabana Yegua, Pueblo Viejo, Peralta, y Padre las Casas, y realmente recorrer estos centros y despertar atención en los jóvenes constituye un esfuerzo enorme pero placentero”, expresó el funcionario.
Anunció que el próximo 21 de este mes volverán a Pedro Corto donde más de 1,000 jóvenes recibirán nuevos certificados, precisamente por las acciones impartidas desde los Centros Tecnológicos Comunitarios.
Informó el director de los CTC que estas acciones formativas han sido realizadas a nivel nacional, y mencionó la UASD, a nivel regional, y en el Este, Higuey, donde también está la extensión de la UASD, y finalmente en Santiago, donde los jóvenes también recibieron sus certificaciones.
Torres fue enfático al señalar que los CTC tienen como propósito esencial buscar soluciones, y no solo reducir niveles de brecha digital, sino de impactar en aquellos jóvenes que son muy vulnerables.
“Sabemos que este tipo de certificados que reciben, no es en sí graduación, es una introducción al saber de acciones y aplicaciones tecnológicas que permiten abarcar un amplio nivel de los componentes tecnológicos”, aseguró Torres.
Los Centros Tecnológicos Comunitarios tienen locales en Las Yayas, Peralta, Sombrero, Villapando, Arroyo Cano. También en Padre Las Casas, Pueblo Viejo y Sabana Yegua, y hasta el momento han sido capacitados 1,203 jóvenes en distintas áreas tecnológicas.
Con estas iniciativas los CTC busca que los jóvenes adquieran las herramientas y los conocimientos necesarios para dar un giro a sus habilidades técnico-profesionales, cultivando en ellos un espíritu emprendedor.
El director de los CTC, Isidro Torres, puntualizó que estas capacitaciones contribuyen a desarrollar estrategias en los jóvenes para que construyan una mentalidad de emprendurismo, al tiempo que se les facilita las técnicas que permitan a cada participante ser más productivo e incorporarse al mercado laboral.
“En el día de hoy llegamos a este evento donde se entregan a jóvenes certificados por su participación en los cursos impartidos, y esto cuesta semanas de esfuerzo y de recorrer los distintos centros como forma de llevar la inducción de las diferentes acciones formativas impartidas”, dijo Torres.
Recordó que acompañó al presidente Luís Abinader en San Juan al evento que organizó el Gabinete de Políticas Sociales, a través de su coordinador, Tony Peña Guaba, y del programa Oportunidad 14-24, y que fue un orgullo que muchos de los jóvenes allí presentes pertenecieran a los distintos CTC que tiene la región Sur.
A juicio de Torres todos los jóvenes que han pasado por los CTC, han recibido la currícula formativa y que eso es fundamental, pues ese programa tiene por objetivo rescatar a jóvenes que ni trabajan, ni estudian y que no están actualizados con los requerimientos del mercado laboral en la parte tecnológica.
“Hoy estamos en lo que es la región Sur 1, que involucra a Sombrero, Bohechío, Sabana Yegua, Pueblo Viejo, Peralta, y Padre las Casas, y realmente recorrer estos centros y despertar atención en los jóvenes constituye un esfuerzo enorme pero placentero”, expresó el funcionario.
Anunció que el próximo 21 de este mes volverán a Pedro Corto donde más de 1,000 jóvenes recibirán nuevos certificados, precisamente por las acciones impartidas desde los Centros Tecnológicos Comunitarios.
Informó el director de los CTC que estas acciones formativas han sido realizadas a nivel nacional, y mencionó la UASD, a nivel regional, y en el Este, Higuey, donde también está la extensión de la UASD, y finalmente en Santiago, donde los jóvenes también recibieron sus certificaciones.
Torres fue enfático al señalar que los CTC tienen como propósito esencial buscar soluciones, y no solo reducir niveles de brecha digital, sino de impactar en aquellos jóvenes que son muy vulnerables.
“Sabemos que este tipo de certificados que reciben, no es en sí graduación, es una introducción al saber de acciones y aplicaciones tecnológicas que permiten abarcar un amplio nivel de los componentes tecnológicos”, aseguró Torres.
Los Centros Tecnológicos Comunitarios tienen locales en Las Yayas, Peralta, Sombrero, Villapando, Arroyo Cano. También en Padre Las Casas, Pueblo Viejo y Sabana Yegua, y hasta el momento han sido capacitados 1,203 jóvenes en distintas áreas tecnológicas.
Con estas iniciativas los CTC busca que los jóvenes adquieran las herramientas y los conocimientos necesarios para dar un giro a sus habilidades técnico-profesionales, cultivando en ellos un espíritu emprendedor.