En este contexto, Porcella subrayó que el gobierno del presidente Luis Abinader ha proporcionado facilidades tanto a las líneas aéreas nacionales como internacionales, con el objetivo de mejorar la conectividad global del país y aumentar de manera sustancial la capacidad de asientos en el parque aeronáutico dominicano.
Porcella, quien asumirá como nuevo presidente de la Junta de Aviación Civil a partir del próximo 16 de agosto, compartió la información durante su participación como moderador en la Primera Reunión de Autoridades Nacionales de Aviación Civil del Gran Caribe y Representantes de Líneas Aéreas, celebrada en el Centro de Convenciones del Ministerio de Relaciones Exteriores.
La jornada de apertura del evento contó con la participación de la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, quien pronunció el discurso inaugural; del canciller de la República, Roberto Álvarez; el ministro de la Presidencia, Joel Santos; el presidente saliente de la Junta de Aviación Civil, José Marte Piantini, y del nuevo director general del IDAC, Igor Rodríguez, quien siguió con interés las exposiciones del día.
Al referirse al impacto de la política de liberalización del mercado aeronáutico dominicano, Porcella dijo que el país ha puesto en marcha una firme estrategia para impulsar y ampliar la política de cielos abiertos, "la cual está basada en la eliminación de la capacidad ofrecida en frecuencia, tipo de aeronaves, número de asientos y volumen de carga, fundamentada en la demanda del mercado”, apuntó el funcionario.
Precisó que, como parte de la actual estrategia, el país está concediendo derechos de tráfico de hasta sexta libertad para vuelos de pasajeros, carga o combinados, y de séptima libertad en operaciones exclusivamente de carga. “Esta última modalidad con el objetivo de estimular el comercio desde y hacia la República Dominicana”, apuntó Porcella.
Explicó que como parte del interés de fomentar el desarrollo de la aviación civil nacional, los diferentes actores del Estado Dominicano están haciendo el esfuerzo para generar una visión compartida que traiga como resultado una mayor apertura de su Política de Transporte Aéreo.
El peso del transporte de carga
Porcella resaltó que, durante los meses de confinamiento total provocado por la pasada pandemia, específicamente entre marzo y junio de 2020, la carga aérea se convirtió en la principal fuente de ingresos para la mayoría de las aerolíneas a nivel mundial.
“En ese año terrible, la industria de carga aérea mundial generó 129,000 millones de dólares, lo que representa un tercio de los ingresos totales de las aerolíneas aproximadamente y un aumento del 10 % al 15 % en comparación con los niveles anteriores a la crisis”.
Agregó que en República Dominicana casi 7 millones de kilogramos de mercancías fueron transportadas en promedio durante esos meses críticos, tanto en exportaciones como en importaciones. “En el año 2021, las importaciones mostraron una recuperación total en diciembre, en comparación con el mismo mes del año 2019”.
Dijo que actualmente el país cuenta con 71 instrumentos y protocolos, divididos entre acuerdos y memorandos de servicios aéreos, así como, acuerdos multilaterales dentro de los ámbitos de organismos internacionales como los son la Comisión Latinoamérica de Aviación Civil (CLAC) y la Asociación de Estados del Caribe (AEC).
Manifestó que la liberalización aérea ha permitido que la República Dominicana pueda contar hoy con cinco aerolíneas nacionales que están operando en vuelos internacionales bajo el reglamento aeronáutico RAD-121, lo que significa que utilizan aeronaves con capacidad para transportar más de 30 pasajeros.
Estas líneas son Arajet, S.A.; Sky High Aviation Service Dominicana S.A; Air Century, S.A.; Red Air S.A. y Sunrise Airways Dominicana S.A.
Señaló que, en afinidad con la política adoptada por la República Dominicana, la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil (CLAC) propuso la suscripción de un memorándum de entendimiento para el otorgamiento de manera temporal del ejercicio de los derechos de tráfico de séptima libertad del aire para vuelos exclusivamente de carga.
De acuerdo con Porcella, mediante el ejercicio de los derechos de tráfico de séptima libertad del aire, se permiten de forma recíproca los servicios exclusivamente de carga, regulares y no regulares, a las líneas aéreas de los países que suscriban dicho memorándum de entendimiento, en igualdad de oportunidades y condiciones, sin restricciones o limitaciones geográficos ni de capacidad.
Este memorándum de entendimiento, contribuye a la recuperación y desarrollo económico regional, posibilitando servicios aéreos más liberalizados y sostenibles en el siglo XXI. A la fecha ha sido suscrito por Brasil, Chile, Costa Rica, Cuba, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
Al destacar los avances que ha logrado la República Dominicana en relación con el transporte aéreo de séptima libertad para servicios exclusivos de carga, regulares y no regulares, Porcella invitó a los Estados presentes a avanzar en la progresiva liberalización del transporte aéreo.