“El Gobierno de México no participó en esta detención o entrega, esto no es así, y vamos a seguir colaborando con el Gobierno de Estados Unidos, como lo hemos hecho hasta esta ocasión”, declaró la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, en la conferencia matutina del Palacio Nacional.
La funcionaria expresó que el Gobierno de Estados Unidos se comunicó el jueves después del arresto de ambos líderes narcotraficantes en un operativo en un pequeño aeródromo cercano a El Paso, en Texas, donde las autoridades les imputarán cargos por fabricación de drogas y manejo de redes de narcotráfico.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de México (SSPC) recibió una primera llamada de la Embajada de Estados Unidos informando de que Zambada y Guzmán López ya “se encontraban bajo custodia de las autoridades”.
Avión privado en el que fueron transportados Ismael ‘el Mayo’ Zambada y Joaquín Guzmán López, en un aeropuerto privado en Santa Teresa, Nuevo México (Estados Unidos). EFE/ César Contreras
“Entrega” o “captura”
Rodríguez, quien mostró las fotografías de ambos líderes capturados, indicó que no puede saberse aún si fue “entrega” o “captura”.
“Ustedes preguntan si fue entrega o fue captura, esa es parte de la información que estamos esperando del Gobierno de Estados Unidos”, sostuvo.
Tampoco confirmó si hubo una negociación entre los líderes del Cártel de Sinaloa y Washington, que responsabiliza a esta agrupación criminal del tráfico de fentanilo a Estados Unidos, donde se estima que al año mueren cerca de 100.000 personas por sobredosis.
“Esa es la parte de la investigación que nosotros tenemos que seguir, pero esperamos el comunicado oficial, como se dio ayer, si fue captura, si fue entrega. ¿Qué es lo que pasó?. Eso es parte de lo que el Gobierno de Estados Unidos tendrá que hablar”, reiteró Rodríguez.
Asimismo, expuso que Zambada, quien nunca ha pisado la cárcel en sus más de cuatro décadas de carrera en el narcotráfico, tiene cuatro ordenes de aprehensión vigentes en México por delincuencia organizada, delitos contra la salud y en materia de armas.
Aún así, evadió responder si México pediría su extradición.
La secretaria agregó que conversaron los fiscales generales de México, Alejandro Gertz Manero, y el de Estados Unidos, Merrick Garland, quienes tuvieron “una buena comunicación”.
La captura despierta particular interés porque ocurre a tres meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, con el tráfico de fentanilo desde México y el poder de los cárteles mexicanos han sido temas clave. EFE