La nipona, que no gana dos partidos seguidos en un Grand Slam desde el Abierto de Australia en 2022 tras estar fuera más de un año por decisión propia y por su primer embarazo, consiguió el lunes su primer triunfo en Wimbledon en seis años, pero no pudo darle continuidad ante la multimillonaria Navarro.
La estadounidense solo cometió cinco errores no forzados en un partido prácticamente perfecto en el que no concedió a Osaka ni una sola de rotura y en el que quebró en cuatro ocasiones el saque de la nipona.
La número 17 del mundo solo necesitó una hora exacta para eliminar a Osaka y a sus 23 años clasificarse por primera vez en su carrera a una tercera ronda de Wimbledon. Navarro se cruzará en la siguiente ronda con la rusa Diana Shnaider, que derrotó a Sloane Stephens y que viene de ganar el título en Bad Homburg, donde ya ganó a Navarro en semifinales.
Su participación en Wimbledon dejará a Osaka al borde de volver a entrar en el top 100.