El paciente más reciente está en recuperación en el hospital, y las autoridades aún no han determinado cómo se produjo el contagio de la bacteria responsable de la enfermedad.
El Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente del Condado de Pueblo (PDPHE) en Denver, Colorado, informó que un residente ha sido infectado con la bacteria Yersinia pestis, causante de la peste bubónica, aunque se desconoce el origen y la forma del contagio.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, el último brote significativo de peste bubónica en el país ocurrió en Los Ángeles durante la década de 1920, resultando en 30 muertes confirmadas.
Síntomas de la peste bubónica
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la peste es causada por Yersinia pestis, una bacteria zoonótica que se encuentra comúnmente en pequeños mamíferos y las pulgas que los parasitan.
Las personas infectadas suelen presentar síntomas después de un periodo de incubación de 1 a 7 días. La peste se divide en dos formas: bubónica y neumónica, siendo la bubónica la más frecuente.
La OMS añade que la peste puede ser una enfermedad grave para los humanos. Sin tratamiento, la peste bubónica tiene una tasa de letalidad entre el 30% y el 60%, mientras que la peste neumónica resulta fatal en casi todos los casos.
Entre 2010 y 2015 se notificaron 3,248 casos en todo el mundo, de los cuales 584 fueron mortales. En el siglo XIV, la peste fue una pandemia con altas tasas de mortalidad, pero hoy en día puede tratarse y prevenirse.
Según la Mayo Clinic, cuando una persona tiene peste bubónica, aparecen bubones en las axilas, la ingle o el cuello.
Los bubones pueden ser dolorosos o no, y su tamaño varía desde menos de medio centímetro hasta diez centímetros.
Otros síntomas característicos de la peste bubónica incluyen fiebre alta repentina, escalofríos, dolor de cabeza, cansancio, malestar general, debilidad y dolor muscular.
MedlinePlus destaca que las personas con peste deben recibir tratamiento de inmediato. Si no se administra tratamiento dentro de las primeras 24 horas después de los síntomas iniciales, aumenta el riesgo de muerte.
El tratamiento para la peste incluye antibióticos, oxígeno, líquidos intravenosos y asistencia respiratoria. Las personas con peste bubónica deben mantenerse aisladas de otros pacientes, y las personas cercanas deben ser vigiladas. Para prevenir la peste, el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles recomienda:
Evitar el contacto con roedores y pulgas.
Eliminar lugares donde los roedores y animales callejeros duermen, se esconden o encuentran comida alrededor de la casa.
Usar productos antipulgas al aire libre y aplicarlos también en mascotas.