“Asumo toda la responsabilidad por mis palabras”, escribió García en una publicación en X. “Perdón a todos los que ofendí”.
García continuó diciendo que es “incomprendido”, que está luchando contra el abuso de sustancias y que está “yendo a rehabilitación”.
Su disculpa se produjo un día después de que el presidente del Consejo Mundial de Boxeo, Mauricio Sulaimán, anunciara que su organismo sancionador expulsaría a García por sus controvertidas acciones durante la transmisión en vivo.
“Rechazamos cualquier forma de discriminación”, escribió Sulaimán. “Temo por el bienestar de Ryan, ya que ha rechazado múltiples intentos de ayudarnos con su salud mental y abuso de sustancias”.
Oscar De La Hoya, promotor de García, denunció el comportamiento de su peleador en un comunicado fuertemente redactado emitido el viernes en X.
“No hay lugar para el odio o la intolerancia en mi empresa. Punto. Condeno las palabras de Ryan en los términos más enérgicos posibles”, escribió De La Hoya. “Veo que se ha disculpado, y eso es un comienzo, pero es sólo un comienzo para recuperar la confianza y el respeto de aquellos de nosotros que lo hemos apoyado y continuamos apoyándolo. Esperamos que Ryan aproveche el tiempo que tiene lejos del deporte para resolver los temas que ha discutido públicamente. Estamos listos para ayudar en todo lo que podamos”.
García actualmente cumple una suspensión de un año por parte de la Comisión Atlética del Estado de Nueva York después de dar positivo por ostarine, una droga que mejora el rendimiento. Esa suspensión es retroactiva a la victoria por decisión de García el 20 de abril sobre Devin Haney, que desde entonces ha sido anulada a un no-contest.
García negó con vehemencia haber usado drogas para mejorar el rendimiento a sabiendas. Dos suplementos incluidos en los formularios de control de dopaje, que fueron presentados junto con las muestras de orina de García el 19 y 20 de abril, mostraron la presencia de la sustancia prohibida.
García, de 25 años, también fue arrestado en junio por delitos graves de vandalismo derivados de un incidente en un hotel de Beverly Hills, que lo acusó de causar daños estimados en 15.000 dólares.
La familia de García abordó su reciente comportamiento preocupante, así como sus comentarios en las redes sociales, afirmando que "no se alinean con su verdadero carácter o creencias ni las de nuestra familia".
"Nuestra familia inequívocamente no apoya ninguna declaración que [García] haya hecho sobre raza o religión; estas no reflejan quién es realmente Ryan y cómo fue criado", decía la declaración de la familia. "Quienes conocen a Ryan pueden dar fe de este hecho. Ryan ha sido abierto sobre su lucha constante con la salud mental a lo largo de los años y, como familia, estamos comprometidos a garantizar y alentar que reciba la ayuda necesaria para afrontar este momento tan difícil y abordar su bienestar inmediato y a largo plazo".