Cinco años después, Phoenix ha regresado al festival italiano para la premiere de Joker: Folie à Deux, la esperada secuela del filme, una vez más dirigida por Phillips y con Lady Gaga uniéndose a la fiesta en la piel de Harley Quinn.
La trama arranca justo donde dejamos la primera entrega, con Arthur Fleck (Phoenix) a la espera de juicio e ingresado en el asilo Arkham. Allí conocerá a la mujer de sus sueños, una Harley que lo arrastrará a un romance demoledor y muy musical.
El filme, que llegará a las salas el 4 de octubre, ya ha celebrado su premiere veneciana y, por lo pronto, no ha recibido las reacciones entusiastas de su predecesora. Recogemos las críticas publicadas hasta el momento.
John Nugent (Empire Magazine): "Un romance musical tan dulce y cautivador como puede ser entre dos psicópatas asesinos. Su aproximación chiflada no convencerá a todos los fans de los cómics, pero encuentra una esperanza rara y trágica totalmente propia".
David Rooney (The Hollywood Reporter): "Gaga es una presencia convincente y llena de vida, diferenciando afinidad y obsesión, mientras da a Arthur una oportunidad de forma entrañable... Sus números musicales, tanto a dúo como en solitario, tienen una vitalidad que una película a menudo adusta necesita desesperadamente".
Richard Lawson (Vanity Fair): "Es sorprendentemente aburrida, un procedimiento innecesario que parece despreciar a su audiencia".
David Ehrlich (Indie Wire): "Folie à Deux baila claqué en su lugar la mayoría de su desganada duración, encadenando una serie de números musicales insignificantes que resultan demasiado evidentes o muy vagamente relacionados con los personajes para expresar algo".
Owen Gleiberman (Variety): "Joker: Folie à Deux puede ser ambiciosa y superficialmente escandalosa, pero en el fondo es una secuela demasiado cautelosa. Phillips ha hecho una película en la que Arthur realmente es el pobre Arthur; no hace nada malo y no va a amenazar la sensibilidad moral de nadie".
Alison Willmore (Vulture): "Joker: Folie à Deux es la película de Arthur, y Arthur no es tan interesante, pese a todo el esfuerzo que pone Phoenix en interpretar al personaje detallando su estado metal (exquisitamente angustiado) y físico (con el pecho hundido)".
Peter Bradshaw (The Guardian): "Aunque termina siendo tan estridente, laboriosa y a menudo plana y aburrida como la primera película, hay una mejora".
William Bibbiani (The Wrap): "Es una película triste, reflexiva e impresionantemente rara que usa la teatralidad de los musicales de cine para debilitar las ambiciones de su héroe en lugar de elevarlas".