El ministro de la Niñez y la Adolescencia, Walter Gutiérrez, calificó el abuso sexual infantil como una “pandemia” que afecta tanto a Paraguay como a la región. En una entrevista con EFE, Gutiérrez destacó que la propuesta legislativa, que actualmente tiene media sanción en el Senado, busca modificar los artículos 128. También el 135 del Código Penal. Esto para aumentar significativamente las penas para los responsables de estos crímenes.
La propuesta de ley prevé elevar la condena máxima por abuso sexual infantil a 28 años. También colocándolo como el segundo delito con las penas más severas en el sistema judicial paraguayo, solo detrás del homicidio doloso, que tiene penas de hasta 30 años. Este aumento en las penas busca abordar la creciente incidencia de casos de abuso sexual infantil, que han tenido un impacto devastador en la sociedad paraguaya.
Penas actuales por abuso sexual infantil
Actualmente, las penas por abuso sexual infantil pueden llegar hasta 20 años de prisión en casos graves. La nueva legislación también plantea un incremento en las penas para los casos menos graves. Los mismos pasarían de entre 4 y 12 años de prisión a entre 5 y 15 años.
Gutiérrez enfatizó que, aunque el endurecimiento de las penas es crucial, no es la única solución. Destacó la importancia de la prevención y la educación como componentes clave para combatir el abuso sexual infantil. “El aumento en las penas es solo una parte del enfoque. La educación y la prevención juegan un papel fundamental en la erradicación de este problema”, subrayó.
La reforma legislativa se da en un contexto en el que Paraguay ha visto una tendencia preocupante en el número de denuncias de abuso sexual infantil. En 2022, se reportaron 3.794 casos, lo que equivale a casi un caso cada dos horas. Las cifras de 2023 muestran una ligera disminución, con 3.552 denuncias registradas. Además, en los primeros seis meses de 2024 ya se han reportado 1.840 casos.
Si la propuesta de ley es aprobada, Paraguay se posicionará con una de las penas más estrictas en la región para el abuso sexual infantil. También alineándose con medidas similares en otros países como México y Perú, que también han tomado medidas drásticas para abordar este grave problema. EFE