A esa conclusión llegó la Secretaría de Energía y Minas del Partido de la Liberación Dominicana, expuesta por su titular, Martin Matos, vocero de la rueda de prensa efectuada este martes en la Casa Nacional Reinaldo Pared Pérez acompañado de Fabio Peña y Raymil Montás, sub secretarios, Maribel Acosta, del Comité Político, Andrés de las Mercedes y Milton Reyes, del Comité Central.
Matos explicó que estos apagones no solo generan incomodidad y frustración en la vida diaria de los ciudadanos, sino que también tienen un impacto negativo en la economía, especialmente en los pequeños y medianos negocios que dependen de un suministro eléctrico constante para operar.
“Además, la incertidumbre en el suministro de energía afecta la calidad de vida, la salud y la seguridad de todos los dominicanos, subrayando la urgente necesidad de reformar y fortalecer nuestro sistema eléctrico”, resaltó.
El también miembro del Comité Central del PLD destacó que desde la llegada al poder del PRM en 2020, se inició un proceso de deterioro del sector eléctrico que ha derivado en la crisis eléctrica que hoy vivimos, recordando que comenzó con el despido masivo de técnicos altamente calificados, la paralización de planes de expansión y mantenimiento de redes y subestaciones eléctricas.
Igualmente, con un incremento desmesurado en el gasto público, reflejado en el aumento de la nómina de empleados en las empresas eléctricas estatales y una notable reducción en la inversión en infraestructura, particularmente en los segmentos de transmisión y distribución, afectando gravemente el servicio a nivel nacional.
“En lugar de destinar los recursos necesarios para mejorar la infraestructura y reducir las pérdidas, una parte considerable del presupuesto nacional se está utilizando para cubrir el déficit generado por la mala gestión y las ineficiencias crecientes en el sector”, se precisa en un documento entregado a la representación de los medios de comunicación.
Reveló que, a junio de 2024, el déficit alcanzó la alarmante cifra de RD$43,577.3 millones, lo que obligó al Gobierno a aumentar en RD$6,000 millones el subsidio eléctrico en el presupuesto reformulado en julio de este año. “Para abril de 2024, las pérdidas totales ascendieron al 41.9% de la energía comprada por las distribuidoras del país. Estas pérdidas, que incluyen tanto pérdidas técnicas como no técnicas, son producto de la ineficiencia en la infraestructura y de una gestión comercial deficiente”.
La secretaría de Energía y Minas del PLD sostiene que la empresas distribuidoras de electricidad han fracasado en implementar estrategias efectivas para reducir las pérdidas, mejorar la recaudación y optimizar el uso de recursos, y por lo tanto es urgente una reestructuración profunda en la gestión de estas empresas para asegurar las inversiones necesarias, dar seguimiento a los planes de mejora y mantenimiento, y adoptar medidas efectivas para reducir las pérdidas y mejorar la calidad del servicio.
Finalmente, el PLD hace un llamado urgente a la acción, subrayando que el sector eléctrico necesita una reforma integral para superar las actuales deficiencias y garantizar un servicio eficiente, justo y sostenible para todos los dominicanos, en ese sentido la organización política se compromete a seguir luchando por ese propósito.