Trump declaró anteriormente que despediría a Smith una vez que asumiera el cargo, con lo que rompería normas anteriores sobre las investigaciones de fiscales especiales.
“La posición del Departamento (de Justicia) es que la Constitución requiere que este caso sea desestimado antes de que el acusado asuma el cargo”, escribió Smith en una presentación de seis páginas. “Este resultado no se basa en los méritos o la fuerza del caso contra el acusado”.
La persecución penal de Smith contra Trump durante los dos últimos años por intentar subvertir las elecciones presidenciales de 2020 y su manejo indebido de documentos clasificados representó un capítulo extraordinariamente singular en la historia de Estados Unidos: nunca antes un antiguo ocupante de la Casa Blanca se había enfrentado a cargos penales federales.
Acusado de anular derrota
Aunque el caso de subversión electoral culminó con una sentencia histórica de la Corte Suprema este verano que dijo que Trump gozaba de cierta inmunidad presidencial frente a un proceso penal, la estrategia de Trump de retrasar el caso aseguró que nunca se iniciara un juicio antes de las elecciones de noviembre.En el caso electoral al que se enfrentó Trump en Washington, Smith acusó al entonces expresidente por sus esfuerzos para anular su derrota electoral en 2020.
“La posición del Gobierno sobre los méritos de la acusación del acusado no ha cambiado”, dijo Smith en la presentación.
La jueza de distrito estadounidense Tanya Chutkan había estado decidiendo qué parte de la conducta de Trump en el centro del caso está protegida por la inmunidad después de que los fiscales expusieran el mes pasado sus argumentos de por qué el fallo de la Corte Suprema no debería tener ningún impacto en el caso.
Después de que Trump ganara la reelección, los fiscales pidieron a Chutkan que suspendiera una serie de plazos poselectorales en el caso. Esto mientras sopesaban sus próximos pasos.
Trump se declaró inocente de todos los cargos
Steven Cheung, portavoz de Trump, calificó la medida de “gran victoria para el Estado de derecho” en un comunicado.“El pueblo estadounidense y el presidente Trump quieren el fin inmediato de la instrumentalización política de nuestro sistema judicial y esperamos unir a nuestro país”, añadió Cheung.
Asimismo, Smith dijo este lunes que abandona su acusación contra Trump por el presunto manejo indebido de documentos clasificados. Pero que los fiscales mantendrían vivo este caso contra dos de sus empleados.
El caso se encuentra actualmente ante el Tribunal de Apelaciones del 11º Circuito de EE.UU.. Esta está revisando la orden de un juez que desestimó todos los cargos.
Los coacusados son Walt Nauta y Carlos de Oliveira, que trabajan para Trump y están imputados por ayudar al expresidente a obstruir una investigación federal. Esta sobre documentos confidenciales del Gobierno extraídos de su primera administración.
Los casos estatales continuarán
Como presidente, Trump no tendrá potestad para interferir en los procesos abiertos contra él por las autoridades estatales de Georgia y Nueva York. Sin embargo, los tribunales de esos casos aún tendrán que resolver las cuestiones de inmunidad. Además, los problemas planteados por su regreso a la Casa Blanca.La semana pasada, el juez que supervisa el caso penal de Trump en Nueva York pospuso indefinidamente su sentencia. Un jurado del estado condenó a Trump a principios de este año por 34 cargos de falsificación de registros comerciales para encubrir un pago de dinero por silencio realizado durante la campaña de 2016 a la estrella de cine para adultos Stormy Daniels, quien alegó un romance previo con el presidente electo. (Trump niega el romance).
Y Trump sigue trabajando para evitar ser procesado en Georgia, donde es acusado en un extenso caso RICO que le acusa a él y a varios aliados de intentar anular su derrota electoral de 2020 en el estado. CNN