Además, enfatizó la importancia de la colaboración internacional, particularmente entre la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la DEA y otros organismos, para enfrentar el narcotráfico de manera efectiva.
“La lucha no puede quedarse en el decomiso”
Domínguez Brito reconoció la importancia de la incautación, calificándola como un duro golpe al crimen organizado, pero advirtió que sin respuestas claras, la confianza en las instituciones podría verse afectada. “¿De dónde vino esta droga? ¿Quiénes facilitaron su ingreso al país? Estas son preguntas que necesitan ser respondidas para demostrar que se está enfrentando el problema con transparencia y determinación”, señaló.
Contradicciones sobre el origen del cargamento
El exprocurador llamó la atención sobre las contradicciones que han surgido en torno al posible origen de la droga. Mientras países como Guatemala y Honduras han negado estar vinculados, surgen dudas sobre cómo y dónde se cargó el contrabando. Según Domínguez Brito, estas inconsistencias deben ser aclaradas para fortalecer la credibilidad de los organismos responsables de la seguridad y el control en el país.
Fortalecer controles y tecnología
Domínguez Brito también abogó por un fortalecimiento de los sistemas de vigilancia en puertos, aeropuertos y fronteras, destacando que cada cargamento incautado pone en evidencia fallas en los controles. “La tecnología avanzada y la capacitación constante del personal deben ser prioritarias. No podemos permitir que la República Dominicana se convierta en un punto vulnerable para el tráfico de drogas”, afirmó.
Unidad nacional contra el crimen organizado
Finalmente, hizo un llamado a la unidad nacional para combatir el narcotráfico, subrayando que este no es un problema que pueda resolver un solo gobierno o institución. “Es necesario un compromiso de todos los sectores del país, trabajando en conjunto con nuestros aliados internacionales, para enviar un mensaje claro: la República Dominicana no será un puente para el crimen organizado”, concluyó.